Nuevamente Nicolás Lodeiro tuvo una participación destacable en un  clásico. El uruguayo, debido a la temprana expulsión de Pablo Perez, debió situarse en diferentes posiciones del campo de juego como también aportar tanto en defensa como en ataque.

En cuanto a lo percibido por el propio jugador, éste expresó "Había que dar una mano más que nada en defensa, me tocó correr y ayudar a mis compañeros, aguantamos resultado, queríamos ganarlo".

El partido no presentó demasiadas situaciones de gol, sin claridad en ambos conjuntos, los minutos transcurrieron hasta finalizar en un pobre empate. Lodeiro asumió que "fue un partido parejo, el que hacia el gol, ganaba".

Además, reconoció que jugar en inferioridad numérica complica aún más el juego hoy en día: "El futbol de hoy es muy parejo, 11 - 10 es mucha diferencia".

Lejos de conformarse con un empate, el uruguayo manifestó el deseo de todo el equipo en cuanto a obtener una victoria "Queríamos ganarlo pero no se dio".

"Físicamente estamos muy bien, hay que seguir trabajando", declaró. El físico de los jugadores era un punto criticado en los comienzos de este nuevo cuerpo técnico, es por ello que se intensificaron los trabajos físicos para poder rendir de la mejor manera en cada partido.

Además mostró su apoyo para su compañero luego de la expulsión "No hablamos con Pablo Pérez, lo vamos a apoyar y sabemos el jugador que es".

En el ámbito internacional, el centrocampista de Boca reconoce que los errores efectuados en el último partido pueden generar consecuencias y un error como fue la insólita expulsión de Pablo Pérez puede condicionar todo el desenlace de una serie eliminatoria: "En Copa Libertadores, estos errores los pagás caro".

Nico Lodeiro se destacó nuevamente frente a los rivales de toda la vida, previamente marcando un gol, en este último clásico tuvo una entrega notable, no sólo fue el responsable de generar juego en ataque sino también aportó en defensa, corriendo de punta a punta, disputando cada pelota al máximo y ocupando posiciones para poder colaborar con todos sus compañeros.