El esquema conservador que presentó Facundo Sava en Avellaneda dio las claras muestras del respeto que le tenía Racing al Atlético Mineiro. Lejos de pelear el campeonato doméstico, a la Academia sólo le quedaba como único objetivo la Copa Libertadores, pero la jerarquía del conjunto brasileño se presentaba como una dura prueba en los octavos de final.

Racing tuvo situaciones claras como para ganar el partido e ir a Brasil con una ventaja en el resultado y con mayor tranquilidad. Sin embargo, pese al empate, el equipo de Avellaneda se mostró entero y con ganas de avanzar en el certamen. La Academia contó con chances para quedarse con el triunfo y Nicolás Sánchez fue uno de los que prefirieron ver el vaso medio lleno de cara a la revancha. "No nos vamos tristes por el 0 a 0. Somos un equipo fuerte de visitante así que la serie está abierta. Se la vamos a pelear allá", afirmó  el defensor, de gran rendimiento durante los 90 minutos.

"Parece que no estaba adelantado por lo que nos comentaron. Pero bueno, ya está. ¿Qué podemos hacer ahora? No podemos quedarnos con ese error. Hoy el primer tiempo fue prácticamente nuestro. Tratamos de ahogarlos, de hacerles sentir el rigor... En el segundo tiempo nos agarraron mal parados en alguna que otra jugada aislada pero el partido fue parejo. El Mineiro es un gran equipo, ya lo sabíamos. Hace tiempo que vienen jugando muy bien, pero no tengo dudas de que tenemos equipo para ganarle allá y seguir en la Copa", concluyó Sánchez, respecto a la actuación de la terna arbitral tras el gol que le anularon a Leandro Grimi por offside  cuando el lateral se encontraba habilitado.

La ida de los octavos se caracterizó por la ausencia de goles. Sin embargo, se define en Brasil. Y todavía hay esperanza. Racing pasaría a cuartos si gana o igualan con goles. En cambio, Mineiro pasaría si gana. Por otro lado, si empatan sin goles irían a penales.