Godoy Cruz dejó su ilusión de pelear una final en San Juan. La derrota frente al clásico rival por dos tantos contra cero, el poco juego y la regular actuación del árbitro Mauro Vigliano formaron un combo que no benefició al conjunto de Méndez.

El inicio del primer tiempo comenzó repleto de inconveniente con la parcialidad del verdinegro quien no se cansó de tirar objetos y bombas de estruendo al área defendida por Rodrigo Rey.

Desde el minuto nomás comenzaron a tirar bombas y fuegos artificiales al campo de juego, situación que el árbitro Mauro Vigliano no manejó correctamente. Con poco tacto, sin un fluido dialogo con el jefe del operativo policial, continuó el desarrollo del juego.

Todo este momento de tensión, iba a hacer mella en el juego del elenco de Sebastián Méndez que no iba a poder  encontrar el juego que viene desarrollando correctamente desde hace fechas.

A los seis minutos, con la reanudación del juego Godoy Cruz demostró mayor jerarquía. Dominio de pelota, triangulación y mas despliegue futbolístico fueron las tres patas del trípode de juego. Pero sólo duró unos instantes. Once minutos después del pitazo inicial de Vigliano, y después de una falta sobre un jugador de San Martín; vino un centro llovido al corazón del área defendida por el ex Newell’s que vino a dar justo en la cabeza de Escudero que la direccionó abajo a la derecha del arco de Rey, quien vio anulado su esfuerzo con el balón adentro. La pelota besaba la red y el Santo ganaba uno a cero.

El gol marcó un inmediato baldazo de agua más que helada para los dirigidos por Sebastián Méndez, que comenzó a pedir mayor atención y a exigirle a sus jugadores una presión más alta.
En cambio, la apertura del marcador se tradujo en mayor confianza en el local, quien se calzó el partido al hombro y fue inmediatamente a buscar la victoria.

Zuqui, en el mediocampo Tombino, estaba en un bajo nivel, Ayoví y García solitarios arriba ya que el juego no llegaba a esas latitudes del campo, Silva y Pol Fernández con momentos de buen juego esporádicos y Godoy que en la mitad de la cancha nada podía hacer ya que siempre estaba rodeado de camisetas verdinegras.
Abajo, la defensa estaba bastante segura con Viera y Ortíz que no modificaron su buen nivel de juego.

A partir de los 25 minutos y hasta el final el partido entró en un largo letargo que solo finalizó cuando Vigliano marcó la ruta hacia el entretiempo.
Bajo la espera de que reaccione el elenco mendocino (de muy buenas segundas mitades) reaccione, los dirigidos por Méndez marcharon cabeza abajo a un vestuario rodeado de banderas de Godoy Cruz.

Pero el inicio del segundo tiempo no fue en lo absoluto diferente. San Martín de San Juan defendió el resultado con mayor jerarquía de juego y desde el inicio, al minuto de juego, Dening tuvo una clara chance estrellando un pelotazo contra el palo de Rey (a quien le hizo falta).

Godoy Cruz  se notó en la segunda mitad totalmente desorientado, desconcentrado y con muchos errores a nivel futbolístico. Así todo, Ayoví estrelló un soberbio cabezazo en el travesaño de Ardente que además contuvo otros remates de parte de la delantera de Mendoza.

A esta altura, con un equipo errático, el ingreso del Mago Ramírez y Ángel González simulaba una ayuda al ataque Bodeguero pero la defensa férrea de los Santos avizoraba un resultado por la mínima a favor del verdinegro.

Además, el ingreso de Correa por Ceballos aseguró la idea de Méndez de buscar el empate. Por momentos, luego de los treinta minutos de la segunda mitad, Godoy Cruz volvió a tener el juego que mantuvo por fechas pero no bastó.
En plena área sanjuanina, el Morro García asestó un irresponsable codazo a un jugador de San Martín y vio el cartón rojo.

Vigliano, que curiosamente hoy cobró absolutamente todas las faltas cometidas, fue en pasajes del partido un personaje que permitió el juego brusco por parte de algunos jugadores de San Martín pero no así algunas faltas leves del lado Bodeguero, que se llenaba de tarjetas amarillas.

Sobre el final, y después de un córner al que fue Rodrigo Rey, Montagna corrió con el balón y desde tres cuartos metió un zapatazo que venció todo esfuerzo de Rey y marcó el segundo tanto. También vio la roja directa Jaime Ayoví por una falta igual de irresponsable sobre un rival.

La ilusión de Godoy Cruz terminó en manos de San Martín y en la vecina provincia. Pero atento hincha, Godoy Cruz hizo uno de los papeles más meritorios en diez años de primera división y jugará por una plaza en la Libertadores 2017 frente a Estudiantes de La Plata o Atlético Tucumán. Parate, emociónate y aplaudí a este equipo que demostró que en el interior, el buen juego también existe.