El Real Madrid venció al conjunto de Simeone por penales y se consagró campeón de la Champions League.

Fue un partido en el que el juego se desarrolló tal cual lo habían anunciado durante toda la semana los analistas de este deporte. Por instantes se defendía un equipo, por ratos el otro y en algunos momentos la pelota parecía no tener dueño.

Sin embargo en el comienzo parecía que los muchachos de Zidane tenían todo para imponerse. Dos jugadas claras en los primeros siete minutos hacían temblar la valla contraria y generaban miles de dudas en la defensa colchonera. A los 14' una falta innecesaria cometida por Juanfran llevó a que Gareth Bale ejecutara un tiro libre envidiable que se cerró a un metro de la línea de meta. Antes de que el arquero Oblak pudiese hacer algo, Sergio Ramos, que estaba con un pie en posición adelantada, la desvío y marcó el primer tanto de la final.

 A partir de entonces el Real Madrid fue desapareciendo lentamente y el protagonismo comenzó a ser cada vez más del Atlético. La escuadra de Diego Simeone tomó el control de la redonda y como podía se iba filtrando en el área adversaria. 

 Un hecho clave se dio en el comienzo del complemento, cuando ingresó Yannick Carrasco en lugar de Augusto Fernández, quien vivió una incómoda e imprecisa etapa inicial. A partir de entonces, con el nuevo jugador ingresado, la cancha parecía inclinarse cada vez más en favor del conjunto albirrojo. 

 Instantes después de haber iniciado la segunda mitad, más precisamente a los 48', Pepe cometió una dudosa falta sobre Fernando Torres y el árbitro inglés Mark Clattenburg sancionó penal. Antoine Griezmann fue el encargado de ejecutarlo pero reventó el travesaño y el marcador siguió 1 a 0.

 Las falencias que había tenido el Atleti al inicio del enfrentamiento parecía tenerlas el merengue. La única diferencia era que este último sí había logrado convertir. De todas formas eso cambió cuando a los 79' Juanfran envío un centro al área chica que luego fue empujado por Carrasco al fondo de la red. Estaban 1 a 1 y se debía ir al alargue.

 Poco sucedió en el tiempo extra más que reiterados parates por los calambres que sufrían la mayoría de los 22 hombres que se encontraban en el terreno de juego peleando por la Champions. En la última jugada el Rojiblanco construyó un peligroso contraataque que fue cortado por una infracción de Sergio Ramos, quien recibió tarjeta amarilla a pesar de que debió ser expulsado por la gravedad de su acción.

 Nada pudo evitar que el dueño de la copa se defina desde los once pasos. Iniciaron los de casaca blanca y así fue la seguidilla:

S. Ramos (√)(RM 1-0 ATL), A. Griezmann (√)(RM 1-1 ATL).

Lucas Vázquez (√)(RM 2-1 ATL), Gabi (√)(RM 2-2 ATL).

G. Bale (√)(RM 3-2 ATL), Saul Ñíguez (√)(RM 3-3 ATL).

S. Ramos (√)(RM 4-3 ATL), Juanfran (X)(RM 4-3 ATL).

Cristiano Ronaldo (√)(RM 5-3 ATL).

 El portugués, que estuvo flojo durante todos los 120', sentenció la historia y el Real Madrid llegó a su undécima Champions League. El Cholo por su parte estuvo hasta el final arengando a sus dirigidos y tras la derrota se acercó a la tribuna donde estaba su parcialidad, a la cual le dedicó gestos de agradecimiento por el incesante apoyo.