Ahí va Gustavo Bou junto a Hernán Peláez trotando alrededor de la cancha. El delantero padece una metatarsaglia en su pie izquierdo, y después de unos dias pudo volver a trotar. Ésta imagen del goleador averiado fue moneda corriente en la pretemporada. Todos sus compañeros están a la órden de Facundo Sava.

Los nuevos refuerzos empiezan a acoplarse: Willian Candia, es muy afín a su compatriota Óscar Romero; Santiago Rosales empieza a disfrutar de su estadía en Racing; el wing, ex Aldosivi, en el famoso loco toca la pelota con displicencia. Se espera mucho de él: Fernando Quiroz, su técnico en el equipo marplatense, en diálogo con VAVEL lo define: "Santiago es un chico rápido, habilidoso. Se maneja por la zona izquierda de la cancha tanto en un 4-3-3 como en un 4-3-1-2. Tiene un parecido a Ricardo Centurion".

Emanuel Insúa, otro refuerzo, tratará de ganarse un lugar en el lateral que hoy está vacante de competidores: Germán Voboril emigro a Newell´s y Leandro Grimi se desempeñará de segundo central, acompañando a Nicolás Sánchez. 

Dos ausencias notorias con las que tendrá que lidiar este nuevo Racing son Diego Alberto Milito y Sebastián Saja. El capitán y goleador, líder dentro y fuera de la cancha, dejó su legado a Lisandro López, quién portará la cinta y será una especie de técnico dentro del campo de juego. En el arco, Nelson Ibáñez y Juan Musso tomaron la posta tras la ida de Saja, pero a la dirigencia no les convence el rendimiento de ambos, es por eso que iran a la carga por otro arquero. Ya fueron descartados Juan Pablo Carrizo y Fernando Muslera, debido a sus excesivas pretensiones salariales. 

Y ahí está Facundo Sava, tratando de armar un equipo más equilibrado que el anterior. Racing fue el equipo más goleador y el más goleado (29 GF, 26 GC), lo que trajó ciertas dudas en los jugadores. Más allá de haber protagonizado dos goleadas categoricas, de mismo resultado, contra Unión y Atlético Rafaela (6-3 ambas), el equipo sufria en el retroceso. El sistema táctico 4-3-3 le rindió rédito hasta que se volvió repetitivo, predecible y hasta a veces con interpretes en posiciones que no rendian a su máximo potencial: Lisandro López, en varios partidos jugó de extremo y eso hizó que el desgaste suyo sea mayor. Otro ejemplo claro es él de Óscar Romero, el talentoso enganche paraguayo, sufrió jugando encerrado sobre la banda no teniendo el panorama suficiente para poder asistir a sus compañeros.

El equipo clasificó de manera agónica a la fase final de Copa Libertadores y perdió con Atlético Mineiro en octavos de final. Mientrás un equipo muleto, sin cohesión en sus lineas, perdia estrepitósamente en Rosario frente a Newells por 5 a 0.

Ya con más tiempo para poder trabajar, debido a que el calendario no apremia como en el campeonato pasado, Facundo Sava piensa en armar un equipo con una idéntidad definida.

El tentativo que tiene en la cabeza sería un 4-3-3 con: Ibáñez o Musso; Iván Pillud o Gastón Diaz, Nicolás Sánchez, Leandro Grimi, Emanuel Insúa; Luciano Aued, Diego González (firmará en los proximos dias) o Francisco Cerro, Marcos Acuña; Gustavo Bou, Lisandro López y Óscar Romero.