En lo que fue una clara desprolijidad, la dirigencia de Racing decidió echar en el día de hoy a Facundo Sava. El entrenador se mostró molesto y dialogó con ESPN Radio FM 107.9 y compartió su opinión con el público.

Si hay algo que Sava no merecía, era irse como se fue, maltratado, sin que la dirigencia le dé explicaciones, insultado por algunos hinchas que como hizo después la Comisión Directiva luego de perder la final de la Copa Bicentenario 1 a 0 contra Lanús en la última jugada del partido.

“Todos saben lo que yo siento por el club y creo que me merecía otra cosa. Me hubiera gustado que me lo dijera el propio presidente, pero me lo comunicaron después del entrenamiento de hoy”, fue una de las frases más fuertes que dijo ex DT de Quilmes y Unión, entre otros.

 "Estoy tranquilo. Me entregué siempre al ciento por ciento. La autocrítica la hago puertas adentro porque tengo claro qué hice bien y qué no. La verdad que es raro y para mí fue una sorpresa. Estábamos ilusionados con los jugadores. Charlamos unos minutos y queda para mí lo que dijimos. Nunca sentí que los jugadores no me respondieran”, manifestó Sava en ESPN Radio  FM 107.9 contando un poco sus sentimientos y cuál es su paronama sobre su reciente despedida del conjunto acádemico.

Las estadisticas del entrenador en Racing dicen que dirigió a La Academia en 28 oportunidades, gano 10 partidos, empató 11 y perdió 7.

En mi opinión Sava está mal despedido, no digo que se merezca continuar, más allá de que para mí lo correcto era que siga en el cargo. Si la dirigencia lo echó luego de perder un partido, claramente en mayo, cuando se rumoreo con que iba a ser destituido del cargo, pensaban lo mismo que ahora. Yo creo que Sava está mal despedido ya que aunque como director técnico no le fue muy bien, es un ídolo del club, dejó todo siendo jugador y era el gran referente en el Racing que se salvó del descenso.

Por lo pronto la danza de nombres para reemplazarlo ya comenzó, los candidatos son Luis Zubeldía (ya dirigió a Racing en los años 2012 y 2013), Pablo Lavallén, Gustavo Alfaro, Ricardo Zielinski; y el gran sueño de la dirigencia, aunque muy complicado, es Gerardo Martino.

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