River volvió a disputar una final de copa internacional después de unos meses. En este caso, el Millonario se enfrentó ante Independiente de Santa Fé de Colombia, en el Campín de Bogota, estadio en donde obtuvo un valioso empate 0-0, en el partido de ida por la Recopa Sudamericana, el cuál no fue jugado bien por ambos equipos.

La Banda empezó mejor el encuentro, ya que tuvo algunas aproximaciones al área del equipo colombiano, y un tiro de Sebastián Driussi que atajó muy bien el arquero, Robinson Zapata. Sin embargo el partido se emparejó con el correr de los minutos por los efectos de la altura que posee el Campín de Bogotá, ya que este se encuentra situado a 2.500 metros de altura sobre el nivel del mar, y eso afectó claramente el funcionamiento de la escuadra del Muñeco Gallardo, porque a los jugadores les faltaba aire en muchos casos.

A pesar de todo, el Millonario controló el partido en defensa, y no sufrió graves sobresaltos en contra, ya que Independiente de Santa Fé nunca pudo tener una jugada en ataque que sea asociada. De todos modos, el volante de River, Leonardo Ponzio, evitó un gol en la línea del arco, luego de una mala salida que tuvo en un centro el juvenil arquero, Augusto Batalla. Este portero mostró un aceptable nivel en el partido, a pesar de la jugada fallida que tuvo.

Los puntos altos del equipo de Gallardo en el encuentro de ida por la Recopa fueron el paraguayo Jorge Moreira, quién estuvo muy bien tanto en defensa como en la forma que se proyectó al ataque, el ecuatoriano Arturo Mina que tuvo una buena presentación con la Banda Roja, ya que mostró mucha seguridad en la zaga central de la defensa junto a Jonatan Maidana, otro que jugó bien.

El partido de vuelta en el Estadio Monumental seguramente será otra cosa, ya que los futbolistas del Millonario no sufrirán los efectos de la altura a nivel del mar.