Una copa más para la vitrina, y una vez más con el Muñeco al mando. El Millonario sumó su décimo título internacional y cinco de ellos fueron durante la era Gallardo. En los últimos dos años River jugó seis finales de las cuales ganó cinco (sólo perdió el Mundial de Clubes contra el Barcelona) y en este tiempo logró la mitad de  los títulos internacionales que obtuvo en toda su historia. “Hay que darle mucho valor a esto; es emocionante. Uno no se detiene a pensar, pero fueron dos años muy intensos. Jugar una final otra vez y ganarla, con nuestra gente, emociona”, declaró el técnico a la página oficial, emocionado, en el campo de juego.

El equipo de Núñez era el último ganador del certamen, que en 2015 le había ganado a San Lorenzo, y con la victoria ante los colombianos se convirtió en bicampeón de la Recopa Sudamericana. En el título del 2015 los jugadores eran otros, pero el cuerpo técnico supo cómo reemplazarlos y adaptar a los nuevos de la mejor manera: “Es una etapa nueva, porque muchos jugadores se fueron y otros que llegaron y se van a ir metiendo en el equipo. Todo esto tiene que ver con la buena gestión del club y con la predisposición de no quedarse con lo ganado”.

En tan solo dos días River debutará en el torneo local frente a Banfield en el Monumental, por lo que no hay tiempo para seguir con los festejos. Este semestre el conjunto millonario no tiene más citas internacionales, por lo que deberá jugarse todo en la Copa Argentina y el campeonato. “Hay que reconvertirse, más allá de los logros y triunfos. Tuvimos la posibilidad de jugar una final de entrada y es un envión anímico para lo que viene, pero pasó todo muy rápido y no hay tiempo para festejar demasiado. El domingo tenemos a Banfield y en el torneo tenemos que estar a la altura”, concluyó.