El equipo dirigido por Rubén Darío Forestello mostró una vez más su déficit futbolístico por el cual esta pasando. Por la tercera fecha del fútbol de Primera División le tocó viajar a Rosario, en el historial nunca le fue bien en el gigante de arroyito ya que nunca pudo ganarle a Central en su casa, y esta vez no fue la excepción. En un partido pobre para los de Paraná, con faltantes de ideas, fútbol y sobre todo juego volvió a caer.

Rosario Central se impuso 2 a 1 con un gol de Walter Montoya a los 9 minutos del complemento y un zurdazo de Washington Camacho a los 11. En tanto para el Santo, convirtió Nicolás Bertochi. Un partido que contó con cuatro expulsados y cantidad de infracciones.

En un primer tiempo sin mucho que acotar, ambos equipos no mostraron mucho de juego, sin ocasiones de peligro, se fueron al descanso con poco y nada. Tanto en el arranque del complemento central, con el ingreso de Montoya  y Lo Celso,  le dieron la cuota de fútbol que le había faltado antes.

Al local se le abrió el arco a los 8’ con gol de Washington Montoya, luego con un golazo desde fuera del área  de Camacho a los 11’ y con la expulsión del chileno Espinoza (14 minutos) todo parecía terminar en goleada para el Canalla, pero Patronato empezó a jugar mejor, y además, Rosario Central   pasó de tener un hombre de más a uno de menos. La expulsión de  Montoya (autor de uno de los goles) y Paulo Ferrari,  lo dejaban con 9.  Con eso a favor a Patronato le alcanzó solo para el descuento. A 2 minutos del final Nicolás Bertochi marcaría el descuento con una chilena dejando estático a Burgos. Luego sería expulsado Fernando Telechea y  Rapallini marcaría el final del partido.

Patronato viene de derrota tras derrota en su primer participación del torneo cayó ante Temperley 1-0, también lo hizo frente a  Gimnasia de La Plata por la mínima diferencia. Tanto en su tercer partido volvió a caer. Quizás el planteo tácticamente, el mal funcionamiento, la falta de su capitán y  sobre todo futbolísticamente mal momento que esta pasando, hacen caminar al patrón por la línea de los descensos. Lo que el torneo pasado fue su salvación, la localía, hoy es una duda más. 

El Rojinegro se jugará una difícil parada en la próxima fecha contra San Lorenzo, un partido que puede ser clave ya que podría quedar mucho más complicado en la zona de descensos,  de no obtener un buen resultado.