En el pasado mercado de pases, Estudiantes se movió muy rápido para conseguir su primer refuerzo, el 9 de área. Tal como sucedió con Lucas Viatri cuando arribó al club. Pero esta vez hablamos de Javier Toledo, que proveniente, en condición de jugador libre, de San Martin de San Juan firmó contrato por un año con la institución albirroja. El club sabía que el jugador había dado doping positivo y aún aguardaba la resolución de la AFA, por lo cual incluyó una clausula en el contrato del jugador, que decía que durante el tiempo suspendido no cobraría su salario.

Hoy, 22 de septiembre, Toledo cumplió con la sanción de dos meses por la utilización del medicamento OxaB12 en tiempos del club sanjuanino, que no lo dejó debutar oficialmente con la camiseta albirroja.

A partir de ahora el técnico pincharrata Nelson Vivas lo tiene a su disposición de cara a lo que queda del torneo local, donde todavía no encuentra su delantero centro titular, por lo cual se meterá en la pelea ante Lucas Viatri e Ignacio Bailone, que comenzó a ganar lugar en el equipo ante el bajo rendimiento del ex Boca y Banfield.

Casi con seguridad Javier Toledo ocupará un lugar en el banco de suplentes el próximo domingo cuando Estudiantes tenga que enfrentar, en condición de local, a Temperley. De utilizarse el esquema, como contra Atlético Tucumán (4-4-2) Viatri y Toledo podrían compartir la delantera del equipo.

Ignacio Bailone aparece un escalón por encima de Toledo, debido a sus goles y su rendimiento, pero igualmente junto a Viatri, pelearán por el puesto de 9 titular que todavía no tiene un titular indiscutido.