“A lo último ya estaba todo acalambrado, hicimos un buen esfuerzo”, declara el joven volante de Banfield, Emanuel Cecchini. Es que él, de apenas 20 años, se está convirtiendo en el mediocampista central que quiere Julio Falcioni. El Oriundo de Río Negro también confesó que gracias al apoyo que reciben de los más veteranos, los más chicos se sienten “muy cómodos” dentro del equipo. El equilibrio entre experiencia y juventud que se logró en el último año, es quizá el que hoy le está dando los resultados a este plantel. También se animó a dar su análisis: “Creo que el primer tiempo fuimos mejores, en el segundo se hizo un poco desprolijo el partido”.
La sonrisa que se dibujó en la cara de los jugadores e hinchas presentes, cuando el árbitro pitó el final, se hubiese transformado en una mueca de tristeza de no ser por la tapada brillante de Hilario Navarro sobre el final del partido. “En este puesto, uno siempre tiene que estar concentrado”, reza el dueño del arco del Taladro, que se vistió de héroe al taparle el gol del empate a Nicolás Servetto, en el último suspiro del encuentro. “Sabíamos que en los últimos minutos ellos nos iban a tirar pelotazos”, dijo el correntino, quizá prevenido de que esta acción podría haberse llegado a dar en otro momento del partido.
A su vez, el arquero no dejó de destacar la importancia de haber conseguido ganar de local, aunque ahora sabe que “hay que ir a traer el punto a afuera”, cuando en la próxima fecha, visiten a Patronato. “Tenemos que ir partido a partido, siempre pelear lo más alto posible”, finalizó.