Un día volvió al patio de su casa. A ese patio que tantó disfrutó por mucho tiempo. Juan Román Riquelme, ídolo de Boca Juniors, brindó una entrevista en Doble 5, en la cual habló de muchos temas. Uno de ellos fue sobre la localía de la Albiceleste: "La selección argentina tiene que jugar en La Bombonera. Clasificamos fácil. Nosotros sabíamos que se ponían a cantar y había un gol. Todos los estadios que hagan para el hincha de Boca va a quedar chico. Si viene un loco y te hace un estadio para 100 o 150 mil personas, y la cancha se mueve igual, que lo haga. Es el único estadio que se mueve. Vos te quedás quieto ahí y la cancha se mueve. No pasa en ningún lugar, no es normal".

Luego, Román se refirió al presente del club de la ribera: “Este Boca tiene gente muy joven, es algo normal. Los hinchas tenemos necesidad de festejar, estábamos muy ilusionados con la Copa Libertadores. Nos dolió mucho quedar afuera y a los muchachos también. Son jugadores nuevos que llevan muy poco tiempo y no es fácil armar un gran equipo. A Boca le va a llevar un tiempo acomodarse, veremos si los muchachos le agarran la mano rápido al club”.

"Hasta que alguien no juegue 206 partidos acá, este va a ser el patio de mi casa"

En el momento de contar como se convirtió en ídolo del club de la ribera, contestó: "Para triunfar de verdad en este club hay que ser egoísta. Pensar en este club y nada más. A los 37, 38 años se termina, pueden salir a un boliche hasta la hora que quieran y pueden tomar 10 botellas de vino si quieren. Pero si querés triunfar en este club, tenés que estar un poco loco y vivir las 24 horas para este club. Seguramente después lo disfrutarán. Yo dejé todo. Fui muy egoísta. Era la única manera que yo podía demostrarme que podía ser el mejor del fútbol argentino".

"Desde el día que debuté con Unión hasta el último con Lanús, el hincha me ovacionó"

Se aproximan nuevamente las fechas de las eliminatorias camino a Rusia 2018 y el ex Villarreal, Barcelona, entre otros opinó sobre la vuelta de Messi tras su lesión: "Es único. Yo dije que el día que se lesiona pasamos a ser un equipo normal y decían que lo hacía de mala manera. Ahora que se lesionó él y no sacábamos puntos, estábamos pidiendo por favor que vuelva. Tenemos al mejor del mundo. Es lógico que cuando está él, somos un equipo fuerte y cuando no, un equipo que puede ganar o perder con cualquiera. Tenemos la ilusión de que Messi nos regale un Mundial. Siempre que está él, estamos con confianza. Esperemos que esté bien para jugar con Brasil y Colombia".

Por último, Riquelme cerró: "Los compañeros que tuve eran los mejores en su puesto. Miraba al costado y tenías a Ibarra, al frente estaban Guillermo y Palermo. Atrás estaba Serna y Battaglia. Era todo muy fácil. Bianchi tenía más contento al que no jugaba. Nos exigía al máximo y nos enseñó a ganar. Fuimos el único equipo que ganó una final de Copa Libertadores 5 a 0".