El Celeste está viviendo, hace algunas semanas, momentos de tensión muy altos. Uno de los primeros inconvenientes fue la reducción del pago por parte de AFA sin motivo aparente. Dicho dinero es importantísimo para las arcas del club.

Luego, durante el partido ante Independiente, un grupo de violentos frenó el partido exigiéndole a la comisión que ceda ante el pedido de más beneficios (los cuáles no son merecederos). Los cantos barrabravas hacia Hernán Lewin fueron tapados por hinchas que buscan el beneficio del club genuinamente.

Por último, mientras los festejos y la alegria por un nuevo aniversario del Gasolero se multiplicaban, la máxima autoridad de la institución anunciaba que daba un paso al costado debido al apriete de aquellos muchachos "dueños de la pasión".

El grupo liderado por Hernán, con aciertos y errores, puso al club en los primeros planos y lo sacó del ostracismo vivido durante muchos años, hasta con una quiebra a cuestas. Por ese motivo, los socios se movilizaron para charlar con la comisión "sobreviviente", en busca de encontrar una solución a tan difícil momento.

Mañana, el Gasolero se enfrentará a Olimpo en su cancha y necesitará que toda su gente se haga presente, una vez más, para tirar todos hacia el mismo lado y conseguir un triunfo que los mantenga con esperanzas de permanencia.