El plantel de Boca Juniors con Guillermo Barros Schelotto a la cabeza irá al estadio José María Minella, donde visitará al local Aldosivi de Mar del Plata y por tal motivo, haremos un repaso de cómo viene el Xeneize hasta este momento.

Para arrancar, el nivel de los amistosos fue de mayor a menor. Comenzó con una cátedra de fútbol en la victoria 2 a 0 ante Estudiantes de La Plata, siguiendo con un 2 a 2 con San Lorenzo de Almagro, donde a empezar de la parda fue un buen partido en ataque aunque ya se comenzaba a ver los errores en defensa. El partido contra River Plate fue el primer baldazo de agua fría para los dirigidos por el Mellizo, donde de comenzar dominando las acciones pasó a ser atacado y quebrado en defensa, a tal punto que terminó dejando una mala imagen en la derrota 2 a 0 contra el Millonario. Por último, el encuentro en México contra Chivas fue disputado de principio a fin, donde quedó en evidencia que del mediocampo en adelante, Boca es capaz de hacerle daño a cualquier equipo pero en defensa, la zaga central específicamente, sigue dejando muchas dudas de cara al regreso del torneo.

En cuanto a este partido, el Guille decidió darle rodaje a sus mejores jugadores y en la lista puede verse ya a los dos refuerzos, el arquero Agustín Rossi y el volante extremo Oscar Junior Benítez en la lista de concentrados. Precisamente el que más ruido hizo fue éste último, quien llegó por expreso pedido de Guillermo, que lo conoce de su paso por Lanús. Con el joven cedido por el Benfica, Boca gana mucho con un jugador dispuesto a encarar a los defensores y no por una banda sino por ambas, gracias al buen manejo técnico que tiene de ambos pies. Benítez justamente era la pieza que le faltaba a este Boca, que sólo atacaba del lado de Cristian Pavón y ahora en este momento tendrá a alguien más para abastecer al centro delantero.

No hay que dejar pasar por alto tampoco la inclusión de Lisandro Magallán, joven central adquirido a Gimnasia de La Plata cuando éste tenía tan solo 16 años. Licha se destacó en los cotejos que disputó y ante el bajo rendimiento demostrado por Santiago Vergini, Juan Manuel Insaurralde y Fernando Tobio, se hizo un hueco en la consideración del DT boquense, quien dijo que “creció mucho en estos 6 meses” y es una posibilidad que figure entre los once titulares en el encuentro contra el Tiburón.

La única mala de este encuentro es que, como ya se sabe hace algunos días, Barros Schelotto no podrá contar con un jugador desequilibrante como Ricardo Centurión, hombre clave del esquema del entrenador. Con este volante sin jugar, Boca pierde ese jugador que abría huecos en la defensa, que hacía jugar al equipo y que había demostrado que la camiseta 10 que heredó de Carlos Tevez y que alguna vez usó Juan Román Riquelme y Diego Armando Maradona no le pesó en absoluto para ser un líder en la ofensiva del equipo de la ribera.