Se terminó la etepa de preparación. River viajó a Estados Unidos, Mar del Plata, San Juan y Mendoza, para jugar amistosos, probar jugadores, sistemas y aceitar el funcionamiento, sabiendo que éste semestre estará cargadísimo por el reinicio del campeonato de Primera División y la Copa Libertadores.

Enero y febrero, cargados 

Primeramente, el equipo de Marcelo Gallardo disputó la Florida Cup, obteniendo el cuarto lugar: primero, venció 1-0 a Millonarios de Colombia; luego igualó 0-0 ante San Pablo  (perdió 8-7 en los penales) y culminó su presentación en el certamen de EE.UU. perdiendo 1-0 contra Vasco Da Gama.

Inmediatamente, River fue a Mar del Plata para jugar dos encuentros más: primeramente, un equipo alternativo cayó por 3-1 contra Aldosivi, por la Copa Ciudad de Mar del Plata, y días más tarde, la máxima alegría veraniega, en el triunfo 2-0 ante Boca Juniors en el José María Minella, por la Copa Luis Nofal, con triunfo 2-0 (goles de Driussi y Mina). También se jugó un encuentro informal en el Predio de Ezeiza, ante un equipo de la MLS, Dallas FC, e igualdad por 1-1.

Hubo un partido oficial, la Supercopa Argentina ante Lanús, y la derrota estrepitosa por 3-0 en el Estadio Único de La Plata. Fue la gran decepción del verano.

Los últimos amistosos se dieron en la región de Cuyo: contra San Martín de San Juan, en el estadio Bicentenario de ésa provincia, con empate 1-1 y triunfo millonario por 4-1 en los penales y ganar así la Copa BBVA Francés. Y el último, en el Malvinas Argentinas de Mendoza, también en pardas 1-1 ante Independiente Rivadavia, y nuevo triunfo riverplatense desde los 12 pasos (5-3), para quedarse con la Copa Toro Centenario.

Nuevo esquema

El DT probó varias estrategias, desde una línea de tres con enganche al regreso del 4-2-2-2 del semestre pasado, y hoy por hoy el 4-4-2, con la vuelta de Ariel Rojas. Una línea de cuatro bien firme, con Augusto Batalla en el arco, Jorge Moreira de 4, Jonatan Maidana y Lucas Martínez Quarta (que le ganó a Mina) en la zaga central, y Milton Casco de 3. En el medio, está jugando por derecha Nacho Fernández, de gran levantada futbolística, de doble cinco Leonardo Ponzio junto a Rojas, y en la izquierda Pity Martínez. La dupla delantera ideal está compuesta por Sebastián Driussi y Lucas Alario, aunque aparecieron como recambios Rodrigo Mora y Carlos Auzqui (otro de los refuerzos, quien anotó un tanto).

No obstante, el juego fluido del equipo no fue algo que se vio seguido, con poca proyección de los laterales, sin un conductor claro (salvo Nacho Fernández, en ocasiones) y recurriendo permanentemente a envíos por arriba e improvisaciones. Se nota que hace falta a un generador de juego como lo era Andrés D´Alessandro. A pesar de eso, el DT cuenta con variantes para romper líneas (Camilo Mayada, Andrada, Auzqui), pero con poco margen de error, porque llegan los partidos oficiales.

Juveniles en acción

Marcelo Gallardo buscó alternativas en la cantera, aunque fueron pocos los partidos donde apostó exclusivamente a los juveniles, tratando de siempre poner en cancha a un once fuerte. Ante Aldosivi, se presentó Nicolás Franco, el goleador de las Inferiores. Asimismo, Gonzalo Montiel, en ese encuentro ante el Tiburón, fue titular y anotó un gol. Por otro lado, en la Florida Cup, tuvo oportunidades Matías Moya, quien ya debutó en Primera, aunque fue relegado a la Reserva. Asimismo, Tomás Andrade tomó pista para volver al primer plano, sin deslumbrar. Y en los últimos dos partidos, regresó Exequiel Palacios, el talentoso volante que se perdió el Sudamericano Sub 20 por lesión, y que entre 2015 e inicios de 2016 tuvo protagonismo, que quiere ir recuperando. Se los vio poco y nada a dos jugadores que habían tenido consideración el año pasado, Kevin Sibille y Facundo Medina (titular vs Aldosivi).

Reivindicación para Batalla

El arquero de River, castigado por sus últimas actuaciones por los puntos (dos finales y el Superclásico en el Monumental), pudo redimirse en las definiciones por penales de San Juan y Mendoza, siendo clave para el triunfo millonario en ambas tandas. Primero, contuvo dos penales en la serie contra San Martín SJ (a Sebastián Rusculleda y Maximiliano Lugo). Contra Independiente Rivadavia, atajó el disparo de Hernán Encina.

Si bien sólo fueron amistosos, el 1 se mantuvo seguro y con voz de mando para no caer anímicamente. Sin dudas, el guardameta de 20 años con mucho más para aprender, demostró cualidades que deberá respaldarlas en los partidos que se vienen.

Recuperando soldados 

Un regreso importante fue el de Marcelo Larrondo, que tuvo que ser operado nuevamente, y regresó al primer plano. En las dos últimas series de penales, anotó su remate y además, anoche fue él quien asistió a Carlos Auzqui, en el gol en Mendoza. Si físicamente no vuelve a tener recaídas, el ex Central podrá jugar más seguido, ya que ene el semestre anterior, tan sólo estuvo 131 minutos en cancha.

Por su parte, el defensor Luciano Lollo recibió el ata médica y jugó en entrenamientos, pero no sumó minutos en amistosos para no arriesgarlo, llevándolo de a poco. 

Vale destacar también la vuelta de Iván Alonso, que se había lesionado en Estados Unidos y se perdió gran parte de la pretemporada, pero ya está listo para el regreso, firme a sus 37 años.

Lo que viene

River jugará el próximo domingo 5 de marzo, ante Unión de Santa Fe, en el Monumental, en el regreso del torneo de Primera División, para sumar y no perderles pisada a los de arriba (está 7mo, con 22 unidades). En la fecha 16, el Millonario visitará a Lanús y el 15 de marzo, será el debut de la Libertadores, ante DIM en Medellín. Se aproxima una quincena cargada. Gallado lo sabe, y tuvo una pretemporada buena en cuanto a resultados, pero con algunos detalles a pulir.