En la tarde noche del domingo en la ciudad de Buenos Aires, más precisamente en La Bombonera, Boca Juniors y Patronato de Paraná terminaron empardando en 1. El gol Xeneize fue de Darío Benedetto que sigue de racha (tres juegos seguidos marcando) mientras que Damián Arce igualó las acciones para los paranaenses.

La producción del equipo de Guillermo Barros Schelotto no fue muy buena, es más, fue de mayor a menor, donde en los primeros minutos a pesar de no tener la claridad necesaria buscaba los espacios para generar ocasiones, hecho que empezaron a aparecer en la mitad del primer tiempo y donde logró una hegemonía total del campo, obligando a su rival a replegar a todos sus hombres a su área.

Luego llegó el gol sobre el cierre del primer tiempo del Pipa (décimo segundo en el certamen) que justificaba hasta el momento lo que se veía en el partido: un Boca sin mayores complicaciones en defensa, un mediocampo que marcaba el ritmo y el trío defensivo que desequilibraba y le traía muchos problemas al Santo.

En el segundo tiempo, se esperaba a un Patrón golpeado y a un Boca que fuese para adelante en busca de aumentar el score. Pero lejos de eso, el contrincante no se achicó y le jugó de igual a igual, se mostró sólido hasta los 15 minutos del primer tiempo, donde Wilmar Barrios se hizo amo y señor del mediocampo y manejaba los hilos del equipo, Rodrigo Bentancur se animaba a ser un atacante más y Pablo Pérez interceptaba cada balón que pasaba cerca suyo. La deuda estaba arriba, donde los delanteros, en especial Cristian Pavón, que volvió a tener una noche negra con el arco, no concretaba las situaciones de gol. Un claro ejemplo se dio donde en una jugada colectiva, Pérez tocó para Benedetto, quien con un taco limpió la jugada y le dejó la pelota a Pavón, que desparramó a los rivales y decidió patear con el arquero y un defensor por medio al arco en vez de otorgarle el privilegio al Pipa que se hallaba solo y mejor perfilado para anotar.

Los errores son caros y Boca lo sufrió. Los minutos finales, ya sin el colombiano Barrios en cancha, el Xeneize retrocedió en el campo y su rival creció, lo que llevó a que en el epílogo del juego un centro desde muy lejos lo bajen dentro del área chica y sin la marca de alguien, el joven Arce le ponga cifras definitivas al partido.

En síntesis, Boca volvió a dejar mucho que desear en defensa, donde todos los juegos viene teniendo muchas dudas. En el sector medio, la cosa cambió. Fue lo mejor dentro de un equipo que no pudo plasmar la posesión en victoria. Bentancur, Pérez y Barrios fueron grandes dominadores del medio y en ningún momento dejaron pasar a los volantes visitantes. En el ataque, Benedetto volvió a anotar y es una garantía, Nazareno Solís y Junior Benítez no tuvieron un buen partido y Pavón fue lo más bajo del equipo por falta de determinación, juego asociativo y serenidad.

El Mellizo tendrá mucho que hablar con sus dirigidos. Boca dejó escapar la gran chance de estirar a siete la diferencia. De todas formas, se mantiene como cómodo líder con 44 unidades, seguido por Newell's con 39.