Un 28 de noviembre del 2016, en la madrugada de Argentina y a la noche de Colombia, el modesto equipo Chapecoense había eliminado en la Copa Sudamericana a conjuntos argentinos, entre ellos San Lorenzo e Independiente. Clasificó por primera vez en 44 años de historia a una final de un certamen internacional y le tocaba viajar a Medellín para medirse con un grande del continente sudamericano, contra Atlético Nacional para poder quedarse con su primer título internacional en su historia. Tras el accidente, el equipo colombiano le cedió el título de campeón internacional y luego se cruzaron en la Recopa Sudamericana. 

En sus valijas llevaban sueños y mensajes de aliento de sus seres queridos, pero no tuvo un final feliz esa travesía rumbo a Colombia. A las tres de la mañana hora local, el avión sufrió un desperfecto técnico y terminó estrellado en el Cerro Gordo, a pocos kilómetros de su destino final y las primeras informaciones que habían eran de no registrarse ningún pasajero de gravedad.

La azafata Suárez comentó con respecto al accidente: "Yo digo que fue obra de Dios porque seguro quiere que yo haga algo en la tierra, me encomendó alguna misión; yo por ahora me estoy preparando con una empresa en Santa Cruz para dar charlas motivacionales".

Pero cuando iban transcurriendo las horas, el transporte donde se encontraba el Verdão - entre ellos sus jugadores y cuerpo técnico, allegados a la institución y algunos periodistas encargados de la cobertura de esa final- llegaron al lugar policías, médicos y varias ambulancias para asistir a los pasajeros heridos, pero de a poco la cosa fue empeorando cada vez más. Una de las primeras malas noticias fue el fallecimiento de gran parte de la plantilla brasileña y llegó el primer mazazo para todos, porque la escuadra de Chape se había ganado el cariño y la admiración de todo el mundo futbolero.

Una de sus figuras, el arquero Danilo parte fundamental para llegar a las instancias finales del certamen, fue rescatado con vida por la cruz roja y cuando era operado en el hospital no pudo resistir a las graves heridas sufridas. Además del portero fallecieron en el lugar otras 71 personas y solamente hubieron seis sobrevivientes del triste siniestro. En su plantilla estaba el jugador argentino Alejandro Martinuccio pero no viajó por lesión.

Suárez (rojo) junto a sus compañeros de tripulación en aquella jornada.

Follmann declaró del suceso: "Yo me acuerdo que en aquel momento el avión se apagó y se apagaron las luces. Y nos dimos cuenta de que algo había pasado. Solo nos dio tiempo de rezar"

El guardameta suplente Jackson Follmann fue uno de los más graves porque le amputaron una de sus piernas, otro en ser rescatado fue Alan Ruschel -quien sufrió la fractura de columna- y otro es Neto, esos deportistas sufrieron distintas intervenciones. Otros en salvarse del accidente fue Ximena Suárez -asistente del vuelo-, el periodista Rafael Henzel y el auxiliar de la aeronave Erwin Tumiri fueron los otros nombres en sobrevivir. 

La escuadra de Chapecó se ganó el cariño de todos y hoy a un año de la tragedia, serán por siempre eternos campeones. Un 28 de noviembre no será un día más en el mundo.

Un niño no tiene consuelo en el Arena Conda y lo demuestra

La tragedia paso a paso

Todos los horarios están expresados en GMT (+5:00 horas con respecto a la hora local de Colombia). La aeronave despegó de Santa Cruz a las 22:18 y ascendió a nivel de vuelo crucero inicial de FL260, nivelando a las 22:41.

A las 22:49 continuó su ascenso a FL280, donde niveló a las 22:58. Posteriormente, a las 23:54, realizó el ascenso al nivel de crucero final de FL300, nivelando a las 00:14. La velocidad de crucero registrada fue de 220 kt CAS. Durante la fase crucero, el CVR registró varias conversaciones de la tripulación sobre el estado del combustible de la aeronave y pudieron ser escuchadas algunas conversaciones relacionadas con cálculos de combustible.

A las 00:42:18, se escuchó que uno de los pilotos comentaba que desviarían su ruta a Bogotá (SKBO) para reabastecer combustible, sin embargo, a las 00:52:24, otra conversación tomó lugar, poco después de que el avión fuera transferido al ATC Colombiano, relacionada con la decisión de la tripulación para continuar su ruta hacia Rionegro (SKRG).

A las 01:03:01, la tripulación realizó el briefing de aproximación al aeropuerto José María Córdoba (SKRG), de Rionegro.

A las 01:15:03, el CVR cesó de registrar información.

A las 02:30:30, la aeronave inició el descenso, encontrándose a unas 75 NM al Sur de Rionegro. A las 02:36:40, descendió a nivel FL250.

A las 02:40, el ATC transfirió a la tripulación a la dependencia de Medellín Aproximación (MDE APP), la que les ordenó descender a nivel de vuelo FL230 e incorporarse en el patrón de espera del VOR de Rionegro.

A las 02:42:12, la tripulación fue instruida para continuar el descenso a FL210. A las 02:43:09, la tripulación solicitó efectuar espera en el punto RNAV GEMLI, solicitud que fue aprobada. La aeronave alcanzó el punto GEMLI, y a las 02:43:39, entró en el patrón de sostenimiento con FL210.

En este instante, otras tres aeronaves mantenían patrón de sostenimiento en el VOR de Rionegro, a nivel de vuelo FL190, 18.000 pies y 17.000 pies respectivamente.

Otra aeronave, que previamente había solicitado el desvío a SKRG, había reportado una indicación de fuga de combustible, y en el momento, se encontraba comenzando la aproximación final a la pista 01.

A las 02:43:52, la aeronave niveló a FL210, los flaps se ajustaron a 18° y la velocidad se redujo a 180 kt CAS. A las 02:45:03, la tripulación informó al ATC que habían entrado al patrón de sostenimiento en el punto GEMLI a FL210.

A las 02:53:07, los mandos de potencia se redujeron y la aeronave comenzó a descender. A las 02:53:09, los frenos aerodinámicos se extendieron. A las 02:53:24, el selector de tren de aterrizaje fue seleccionado "abajo".

A las 02:53:36, los flaps se ajustaron a 24° y la velocidad del avión comenzó a reducirse, y continuó reduciéndose hasta el final de la grabación FDR.

A las 02:53:45, la velocidad del motor del número 3 no coincidió con la posición de los mandos de potencia y comenzó a apagarse. 13 segundos después, lo mismo ocurrió en el motor No. 4. El ATC emitió instrucciones de cambios de rumbo a las otras aeronaves que se encontraban en el patrón de sostenimiento para despejar la trayectoria a la aeronave LMI2933.

A las 02:54:36, el FDR registró selección de flaps a 33°.

A las 02:54:47, los registros del FDR indicaron bajo nivel de presión de aceite en los motores número 3 y el número 4, con una advertencia de MASTER WARNING. Al mismo tiempo, durante un período de 12 segundos, los valores de N12 del motor número 1 se redujeron del 39,5% al 29,0%.

A las 02:55:04, el motor del número 2 comenzó a apagarse.

A las 02:55:19, durante un período de 10 segundos, los valores de N1 del motor número 1 se redujeron nuevamente de 38,1% a 29,9%. A las 02:55:27, los registros del FDR indicaron bajo nivel de presión de aceite en el motor número 2, con una advertencia MASTER WARNING.

A las 02:55:41, el motor número 1 comenzó a apagarse. Tras la pérdida de potencia de todos los motores, a las 02:55:48, el FDR dejó de grabar.

En este momento, los datos FDR mostraron que la aeronave se encontraba con una CAS de 115 kt, una velocidad de tierra (ground speed) de 142 kt y una altitud por presión de 15,934 ft msl. La aeronave estaba a 15,5NM al sur del umbral de la pista 01de Rionegro, y a 5,4NM al sur del sitio del accidente (que se encontraba a una elevación de 8.516 pies).

Las trazas radar indicaron que el modo C se perdió a las 02:55:55, momento en el que solo existió contacto radar primario para la aeronave. A las 2:58 del 29 de noviembre de 2016, la aeronave de LaMia cayó con 77 personas a bordo.

JUGADORES A BORDO

FALLECIDOS: 19 futbolistas y el DT

Marcos Danilo Padilha, arquero, 31 años

William Thiego de Jesus, defensor, 30 años

Guilherme Gimenez de Souza, defensor, 21 años

Dener Assunção Braz, defensor, 25 años

Filipe José Machado, defensor, 32 años

Marcelo Augusto Mathias da Silva, defensor, 25 años

Mateus Lucena dos Santos, defensor, 22 años

Cléber Santana Loureiro, mediocampista, 35 años

Josimar Rosado da Silva Tavares, mediocampista, 30 años

Gil – Jose Gildeixon Clemente de Paiva, mediocampista, 29 años

Arthur Brasiliano Maia, mediocampista, 24 años

Sergio Manoel Barbosa Santos, mediocampista, 27 años

Tiago Da Rocha Vieira, mediocampista, 22 años

Matheus Bitencourt da Silva, mediocampista, 21 años

Bruno Rangel Domingues, delantero, 34 años

Lucas Gomes da Silva, delantero, 26 años

Everton Kempes dos Santos Gonçalves, delantero, 34 años

Ananias Eloi Castro Monteiro, delantero, 27 años

Canelo – Ailton Cesar Junior Alves da Silva, delantero, 22 años

Luiz Carlos Saroli Caio Júnior, DT, 51 años

SOBREVIVIENTES

Jackson Ragnar Follmann, arquero, 24 años

Hélio Hermito Zampier Neto, defensor, 31 años

Alan Luciano Ruschel, defensor, 27 años

NO VIAJARON

Marcelo Boeck, arquero, 32 años

Jose Nivaldo, arquero, 42 años

Luiz Felipe Schwartz Dal Piva, defensor, 20 años

Rafael Ramos De Lima, defensor, 30 años

Claudio Winck Neto, defensor, 22 años

Demerson Bruno Costa, defensor, 30 años

Lucas Luiz Scalon, defensor, 21 años

Hyoran Kaue Dalmoro, mediocampista, 23 años

Lourency do Nascimento Rodrigues, mediocampista, 20 años

Moises Ribeiro Santos, mediocampista, 25 años

Lucas Mineiro, mediocampista, 20 años

Andrei Alba, mediocampista, 21 años

Nenem – Odair Souza, mediocampista, 34 años

Guilherme Natan de Lima, mediocampista, 17 años

Hernán Alejandro Martinuccio, delantero, 28 años