Tigre volvió a caer, por tercera vez consecutiva en la Superliga, y Ricardo Caruso Lombardi dejó el cargo de DT en Tigre. En el estadio Alfredo Beranger, Tigre empezó jugando muy bien, pero el final no fue el esperado y terminó en una nueva frustración en condición de visitante.

A los 2 minutos, el local tuvo una chance clarísima en los pies de Di Lorenzo, pero la mandó por arriba de Maxi Díaz (quien debutó como arquero de Tigre) y la malogró. El Matador golpeó primero, a los seis minutos: el equipo de Victoria llegó al gol gracias a un derechazo fuerte y preciso de Lucas Menossi, el 5 y capitán del conjunto de Victoria. La alegría duró muy poco, porque al minuto 13, en una pelota parada, Adrián Arregui empató el partido. El partido era intenso, con pocas interrupciones, y Tigre se hubiera puesto 2-1 de no ser por un grosero error del juez de línea, que anuló un gol lícito de Matías Orihuela (perfectamente habilitado por Matías Pérez García).

Al minuto 39, luego en una jugada dudosa ya que antes había sido falta y no fue sancionada por el árbitro Juan Pablo Pompei, cobró penal por mano del uruguayo Carlos Rodríguez, y Juan Sánchez Sotelo definió desde los 12 pasos el 2-1. Y antes del descanso, Lucas Janson, totalmente solo en el área, dilapidó una ocasión clarísima que tiró afuera.

En el segundo tiempo, Tigre quiso pero no pudo llegar a concretar: Rodrigo Depetris, quien entró en el segundo tiempo, tuvo el 2-2 de cabeza y no lo aprovechó.

Así, se despidió del 2017 con una derrota para el olvido, quedando 26° en la tabla de 28 equipos, con 8 puntos en 12 fechas (36 puntos en juego) y de cara a un 2018 muy complicado con los promedios. El próximo DT tendrá mucho trabajo y deberá sumar puntos si quiere mantener a Tigre en Primera.

Los goles