En estas fiestas navideñas, Papa Noel ni los Reyes magos se acordaron de Arsenal, porque en la última fecha de la Superliga Argentina de Fútbol, el equipo que dirige Humberto Grondona, en el Julio Humberto Grondona recibía a un Independiente lleno de suplentes, que tiene en la mente en el próximo miércoles y aun así no se logró el triunfo, por falta de ideas de juego, que realmente careció en la última jornada del año.

Lo más paradójico es que Arsenal empezó mal el campeonato y lo terminó mal. Donde no hubo una reacción clara en los resultados, quizás en el juego se puede analizar y hasta renombrar y destacar partidos donde se mereció el triunfo, pero en general, fue una mala mitad de Torneo.

Un primer tiempo donde Independiente lleno de suplentes y con algunos debuts, salió en la búsqueda de los tres puntos, siempre pensando que el verdadero partido se juega el miércoles. En frente estaba el dueño de casa, Arsenal que venía golpeado.

Una primera parte bastante pareja, pero el conjunto que dirige Ariel Holán era levemente superior por la calidad de sus jugadores. La primera situación de peligro del Rojo se dio a los 18 minutos, cuando Juan Manuel Martínez centralizo un pase para Leandro Fernández que estaba afuera del área grande, con un toque sutil con su pierna derecha y le pegó con la izquierda y así el Diablo se ponía en ventaja.

Desde ese momento, Arsenal decayó en lo futbolístico y en lo anímico e Independiente estaba para meter el puñetazo final del KO, pero al cabo de los primeros 45 minutos no pudo hacerlo.

Ya en el complemento, el transcurso del partido empezó a cambiar con el paso de los minutos, porque Independiente se fue tirando atrás sin motivo y Arsenal tomó el balón, sin alguna idea clara, pero iba con ganas y actitud que algún planteamiento futbolístico.

El tiempo pasó y luego de tanto insistir, Arsenal llegó a los 34 minutos, con un pase pinchado para que Rodrigo Contreras cabeceará para atrás y entró Lucas Wilchez con su pierna derecha ponga el 1-1 parcial.

De esta manera el Arse rompía una racha de cinco partidos sin poder un gol. ¿La última vez? En la derrota por 3-2 ante Argentinos Juniors en el Diego Maradona. Desde ese momento renacía las esperanzas de poder conseguir los tres puntos y festejar por primera vez en casa.

Pero la ilusión no duro mucho, porque a los 45 minutos, Ezequiel Denis, recibió un pase de Jonas Gutiérrez y encaro de derecha y recortó al medio y le pegó de zurda clavándola al palo más lejano de Pablo Santillo que no llegó.

El tiempo que habían agregado se esfumó y Arsenal volvió a sumar una nueva derrota, sin saber a que juega, pero con ganas y actitud más que ideas y un planteamiento para atacar o defender.

Lo cierto que Arsenal empezó con el pie izquierdo y lo terminó de la misma manera que lo inició, sin poder conseguir el objetivo que era salir de la zona de descenso y se demostró  que algunos jugadores no están a la altura de Arsenal y de primera división.