Mauro Bogado venía de un primer semestre bastante flojo en el cual su nivel había bajado con respecto a torneos anteriores y para la Superliga 2017/18 parece haber recuperado la memoria y de a poco volvió a mostrar su mejor versión.

Las primeras fechas no estuvo presente, apenas fue titular en la segunda ante Newell´s y después fue al banco de suplentes. Pero desde la séptima jornada, en la goleada 4 a 0 a Lanús, hasta la última, Bogado estuvo en la formación inicial en todos los partidos.

El jugador de 32 años fue el segundo del mediocampo en anotar más goles. Con tres tantos, quedó atrás de Ignacio Pussetto que hizo cuatro. Dos de ellos fueron de penal (contra Vélez y Chacarita), el otro fue de media distancia ante Olimpo. Quizá lo que le faltó recuperar fue una de sus principales características: el remate desde afuera del área. En pocas ocasiones intentó por esta vía.

Cuando se afianzó como titular, formó una buena pareja en el centro del campo con Adrián Calello. Ambos en muchos partidos le dieron seguridad al equipo mediante la recuperación de la pelota. Se convirtieron en el motor del conjunto quemero.

Tras un gran 2015, durante el 2016 y la primera mitad de este año, tuvo una baja significativa en su nivel y los rumores de su alejamiento del club durante el último mercado de pases fueron fuertes. Pero Bogado se quedó y pudo demostrar que es un buen jugador y hoy por hoy es una pieza clave para el esquema de Gustavo Alfaro.

Llegó a Huracán hace dos años proveniente de San Martín de San Juan. Su debut en el fútbol profesional fue con Argentinos Juniors en 2005. En el Bicho de la Paternal tuvo tres etapas y después tuvo paso por Instituto de Córdoba en 2008 y por Everton de Chile en 2010.