Otra oportunidad dejó pasar River y sumó un empate con sabor a poco contra Chacarita. El equipo de Núñez no encuentra el rumbo en la Superliga y quedó bastante relegado en los puestos de clasificación Copa Libertadores o Sudamericana. En los últimos partidos mantener la valla invicta, es una deuda pendiente o un aspecto a mejorar para Marcelo Gallardo y compañía.  

En la presente Superliga solamente en dos ocasiones no recibió goles y con distintos arqueros, la primera vez fue en la fecha doce contra Unión de Santa Fe, en aquella jornada estuvo bajo los tres palos Enrique Bologna y la segunda fue en la catorce frente al Aurinegro en el debut de Franco Armani en el arco Millonario. Menos en estos dos encuentros y en todos recibió goles empezó con Newells (3), Gimnasia de La Plata (2),Huracán (1),Lanús (1),Godoy Cruz (2),Vélez (1) y ayer el Funebrero (1), agregado en diciembre Atlético Tucumán (1) por Copa Argentina.

El principal problema no es el arco sino el fondo y por eso el cuerpo técnico decidió rotar la zaga todos los cotejos, empezó con Javier Pinola acompañando a Jonatan Maidana, debido a la suspensión de Lucas Martínez Quarta y una vez cumplida la suspensión del canterano en la pretemporada recuperó un lugar en el once titular relegando a Maidana en el banco de suplentes. En la segunda parte de la Superliga y la otra mitad de la Copa Libertadores no pudo encontrar un equilibro en la última línea o en los laterales rotando a Gonzalo Montiel- de flojo rendimiento- como cuatro o peleando titularidad con Camilo Mayada post regreso por suspensión o por la banda izquierda Marcelo Saracchi o Milton Casco

Aproximadamente el promedio de gol recibido es de diez compromisos le convirtieron doce goles en total y es alarmante pensando en lo que se viene nada menos dentro de nueve días la final de la Supercopa Argentina contra Boca.