Cuando se reanudó la segunda mitad del campeonato en la máxima categoría del fútbol argentino, Patronato tuvo un buen arranque, ya que solamente perdió luego de cuatro partidos sin conocer la derrota. Pero no duró mucho, se empezaron a notar fallas en las distintas líneas, y a continuación vamos a repasar lo que fue la mitad de cancha.

El Patrón no logró tener creatividad en la mitad de cancha, hay que tener en cuenta que mayormente el equipo que dirige Juan Pablo Pumpido jugó a tirar pelotazos hacia los delanteros y eso hizo que se notara bastante la falta de creación en el juego. Pocos fueron los jugadores del plantel que se destacaron en ese sector, es el ejemplo del ex Deportivo Madryn, Matías Garrido, muchas veces fue el encargado de manejar los hilos del equipo, de distribuir y circular la pelota.

Además es el mayor goleador de los mediocampistas con tres tantos, y junto con Martín Rivero, otros de los que le cambian la cara al equipo, fueron los que más precisos estuvieron a la hora de dar un pase, 71,2% y 79,1% respectivamente. Después de los recién nombrados, son muy pocos los que superan el 70% en la precisión de los pases, donde tiene muchos problemas el Rojinegro y en varios partidos le costó poder dar dos pases seguidos.

En el sector de la mitad de cancha el Santo cometió una cantidad de faltas que es muy preocupante, son 327 las faltas que ha cometido el equipo, con Damián Lemos como principal responsable de esta cifra, es que el volante es el hombre que más faltas hizo en este sector, 14 de las faltas fueron cometidas por él y además lidera la tabla de amonestados con ocho tarjetas. El que lo sigue es Rivero, quien cometió 16 de las faltas pero también fue el que más recibió, 37 en total.

Otros datos que preocupan en el mediocampo del elenco entrerriano son las asistencias y las ocasiones generadas, en cuanto a esto el rendimiento fue muy pobre, varios de los jugadores no superan de una las situaciones generadas, tampoco logran dar una asistencia. En este aspecto el que más ocasiones generó fue Rivero, nuevamente.

Pumpido deberá hacer algunos cambios en su equipo, cambiar algunos aspectos de su idea de juego, si quiere mantener a Patronato en la máxima categoría del fútbol argentino.