Sin dudas este jovencito fue llamado a la gloria de manera muy temprana. Kylian Mbappé, francés de tan sólo 19 años, ya fue convocado para disputar su primer Mundial de fútbol con Les Bleus. Acumula, en su temprana edad, ya 100 partidos de Ligue 1, con 47 goles marcados en solamente dos equipos: AS Mónaco, donde jugó 60 y convirtió en 26 oportunidades, y Paris Saint-Germain, apareciendo en 40 ocasiones con 21 tantos. Pero no todo queda ahí, porque suma a su palmares una liga con cada uno, una Copa de Francia y una Copa de la Liga, ambas con el PSG. A sus distinciones hay que agregarle que en 2017 fue galardonado con el Golden Boy -mejor futbolista europeo Sub21- por la famosa revista italiana Tuttosport.

Hizo su debut en el combinado nacional un año atrás, en marzo de 2017 y apenas suma 12 encuentros con la selección mayor, marcando tres goles. Comenzó usando la camiseta 20, que luego cambió por la número 12 que vistió con grandeza durante años Thierry Henry, y luego pasó a tener la mítica 10 de figuras y capitanes tales como Michel Platini o Zinedine Zidane. 

Debutó con 18 años y tres meses, siendo el segundo más joven en hacerlo en Francia. No solamente está siendo visto como la promesa francesa, sino que aspira a ser el jugador revelación de la Copa del Mundo, siendo el segundo jugador más joven que disputará esta edición. Incluso si Francia no llega hasta la final, bien podría ser una de las estrellas más importantes, tal como Thierry Henry en 1998 cuando tenía 20 años, y terminar como el goleador de Francia en el torneo. Hay una gran expectativa de que Mbappé demuestre su potencial en la máxima cita del fútbol que se celebrará en Rusia.

Pero no es la primera vez que disputará una competencia con la selección, ya que participó con sus categorías inferiores en el Europeo sub-19 de 2016 celebrado en Alemania, donde se proclamó campeón y bota de plata como segundo máximo anotador del torneo.

Expectativas y pergaminos no le hacen falta, tampoco dinero ni reconocimiento mundial. Sin dudas es una de las jóvenes promesas que tiene el mundo futbolístico, pero por ahora debe demostrar que está a la altura de disputar un Mundial a los 19 años y ser un buen complemento para el equipo francés. Pero también debe demostrar que tiene la capacidad y nivel de ser lo determinante que fueron las anteriores generaciones que vistieron la pesada número 10 de Francia.