El fútbol mundialista de este domingo, al mediodía, tuvo un partidazo como protagonista. Por el Grupo H, se enfrentaron dos equipos que venían de ganar en su debut, Japón vs Senegal, quienes venían de alargar a Colombia y Polonia, respectivamente. Quien ganara este encuentro iba a asegurarse un lugar en los octavos de final del Mundial Rusia 2018. Pero todo quedó en tablas.
El equipo africano, conducido por Cissé, tomó la iniciativa y a los 20 minutos de juego, abrió el marcador Sadio Mané, su estrella y estandarte de Liverpool, con colaboración del arquero japonés Kawashima. Los Leones pudieron ampliar la ventaja, aunque toparon con la figura del guardameta nipón, quien se reivindicó.
Cuando parecía que el dominio senegalés era absoluto, apareció Takashi Inui, que con un gran enganche puso las cosas como al principio. Con el empate de los asiáticos, el partido se hizo de ida y vuelta en el complemento, con chances para ambos bandos. Y de tanto insistir, Senegal volvía a ponerse en ventaja, a través de Moussa Wagué, que arremetió una pelota que cruzó toda el área. Y cerca del final, Keisuke Honda aprovechó un error defensivo y tras una serie de rebotes, le quedó el arco servido para el 2-2 final.
A pesar de que ambos ganaron su primer juego, este empate no le sirvió a ninguno, ya que su suerte quedará descubierta en la fecha final. Con la victoria de Colombia ante Polonia (3-0), los europeos quedaron eliminados, y este es un paborama favorable para Japón, que se medirá ante los eliminados polacos. En cambio, Senegal, que estuvo muy cerca de los 8vos de final, jugará una verdadera final ante los colombianos por un lugar entre los mejores 16 de la Copa del Mundo, como lo lograra en 2002.