Tras la fallida etapa del rosarino Lucas Bernardi como director técnico del primer equipo, donde Estudiantes no dio pie con bola, la comisión directiva albirroja tomó la decisión de que el nuevo DT sea de sangre roja y blanca. El ex jugador pincharrata Leandro Benítez, integrante del equipo campeón de Alejandro Sabella, se quedó con el cargo definitivo tras varios interinatos. Querido por la gente, jugadores, dirigentes y sobre todo, económico.

Aquel partido por Copa Libertadores donde Estudiantes venció a Nacional de Uruguay por 3-1 en el Estadio Ciudad de La Plata fue de suma importancia para que Benítez sea hoy el técnico albirrojo. Dejando atrás la idea bielsista que se buscó en los últimos años, Estudiantes volvió a ser Estudiantes. Garra y corazón sobre todas las cosas, es lo que pregona el Chino. Un DT joven, que conoce a la institución y que tiene una idea definida: Ganar.

Tras dirigir un tiempo en la Reserva del club, y conocer de lleno a los jugadores de la cantera, a Benítez se le abrió la puerta de la Primera División para continuar con una política del club referida a los futbolistas de la cantera. En aquella división supo potenciar a jugadores como Apaolaza, Pellegrini, Lattanzio y Erquiaga, hoy todos integrando el plantel del equipo superior. Con la ida de muchos futbolistas, los reemplazos fueron productos de la institución. A los anteriores también se le suman Pourtau y Ayala, quienes también se sumarán a la Primera División cuando regresen del torneo L'Alcudia.

La mezcla de juventud y experiencia del plantel no reluce un jugador estrella con titularidad asegurada (lo más cercano a eso es Rodrigo Braña), por lo que lo mejor del equipo es el equipo en sí. Los juveniles prometen mucho, pero desde el club quieren respetar sus tiempos y no apurarlos. La categoría 97 tiene mayoría, con las presencias de Gómez, Lattanzio, Cascini, Apaolaza y Rodríguez; sin contar a Ascacibar (hoy en el fútbol alemán), Ireba, Osez y Cabrera también profesionales de aquella categoría.

Con la construcción del nuevo estadio como prioridad, el principal objetivo futbolístico de la comisión directiva fue armar un plantel competitivo, económico y sin una gran inversión monetaria. Juan Otero y Gastón Giménez fueron vendidos a cambio de 2,5 M y 1,7 M respectivamente, pero el Pincha solo incorporó dos jugadores y a préstamo.