Independiente empató 0 a 0 con Santos, en un partido que fue suspendido cuando faltaban 10 minutos por jugar, por incidentes de los hinchas brasileños que usaron pirotecnia, la policía respondió para reprimirlos y se llevaron varios detenidos.

El partido comenzaba en un clima tenso por la previa que tuvo a lo largo de la semana. Los jugadores de Santos cortaban con duras entradas y el árbitro perdonaba cada reiteración de faltas sin sacar tarjetas.

La primer jugada de peligro fue mediante un tiro libre ejecutado por Maximiliano Meza, que intentó un remate al primer palo y el arquero Vanderlei, que fue figura en Argentina, sacó la pelota al córner.

Santos empezó a empujar, mientras que Independiente jugaba con el 3 a 0 y se paraba atrás a defender solamente. Los centros eran la única manera que conseguía el conjunto brasileño para llegar al área. Centros pasados, llovidos y fáciles para Campaña.

A los siete minutos Vanderlei quiso salir jugando, Meza agarró la pelota, encaró y luego se tiró pero el árbitro no cobró penal. Santos respondió de contra con un pase a las espaldas de los centrales, dejando mano a mano a Barbosa que no pudo vencer a Martín Campaña.

Llegada la media hora del partido Bruno Enrique fue el único que intentó rematar desde afuera del área, aunque su tiro a colocar salió débil y nuevamente fue a las manos del arquero uruguayo. 

Una jugada de varios toques surgió a los 38 minutos, Derlis González tocó desde la derecha al medio para Sánchez, la filtró para Barbosa que se quedó sin ángulo y Campaña cubrió el primer palo mandando la pelota al córner.

El primer tiempo se terminaba con una contra en los pies de Silvio Romero, quien juntó dos defensores contra el lateral, tocó al medio para Francisco Silva que siguió unos metros hasta largar la pelota para Meza y Pablo Hernández entró solo por el medio, a él le llegó la pelota, gambeteó al arquero y consiguió el penal. Independiente, con la chance de liquidar el partido. Un gol del Rojo obligaba a Santos meter cinco, algo poco factible por cómo jugaba el local. Meza fue quien tomó la responsabilidad, pateó al palo derecho de Vanderlei que adivinó y Santos seguía vivo para el segundo tiempo.

Al minuto 51, Sánchez jugó con el capitán Víctor Ferraz, tiró un pase rasante para la llegada de Barbosa, que definió mal ante la salida de Campaña. Independiente jugaba de contra y Francisco Silva exigía al arquero con un remate de larga distancia abajo del palo izquierdo.

Los minutos pasaban y Santos no elaboraba una jugada. Solo eran centros fáciles para la defensa del conjunto de Holan. Independiente jugaba a su ritmo no sufría demasiado y cuando intentaba ir al ataque lastimaba. Braian Romero, en otra acción del partido, gambeteó dentro del área y por poco le hacen penal, donde finalmente tocó atrás para la llegada de Hernández y el chileno pateó de primera y la pelota pegó en el travesaño.

En el momento que el Rojo acomodaba la pelota para un tiro libre cerca del área del equipo brasileño, los hinchas de Santos arrojaron una bomba de estruendo justo al lado donde los suplentes de Independiente estaban haciendo la entrada en calor.

Con la eliminación de Santos que era un hecho, la violencia apareció nuevamente. El árbitro Julio Bascuñán esperó cinco minutos para ver si la policía controlaba a los hinchas. Pero como esto no ocurrió el partido fue suspendido a los 86 minutos. De esta manera Independiente pasó a cuartos de final de la Copa Libertadores.

El próximo rival de Independiente será el ganador de la llave entre River y Racing quienes jugarán esta tarde. Al menos un equipo argentino estará presente en las semifinales de la Copa.