El partido por la final de la Copa Vendimia 2018 entre Godoy Cruz e Independiente Rivadavia, el próximo 14 de octubre, finalmente no se jugará. Así lo anunció hoy la Liga Mendocina de Fútbol en un comunicado en el que también anuló la próxima edición, que iba a contar con un nuevo formato.

La máxima entidad del fútbol en Mendoza acusó al Ministerio de Seguridad de "intransigencia" ante "las distintas alternativas" que la institución había presentado para que el evento se llevara a cabo.

El Ministerio que depende del Estado, tomó como antecedente los incidentes ocurridos en el último encuentro entre el Tomba y la Lepra. 

En la previa el Gobierno le exigía a la Liga garantizar la presencia de 800 efectivos de seguridad a un costo de 3 millones de pesos. El 7 de septiembre tras un acuerdo, Carlos Suraci (presidente de la institución) aseguraba que el partido se llevaría a cabo el 14 de octubre. Sin embargo, todo se vino abajo en los últimos días, cuando las autoridades de Seguridad calificaron de "alto riesgo" al torneo.

Desde la Liga argumentan que el Ministerio no utilizó el mismo criterio a la hora de evaluar el partido por Copa Argentina que disputaron Boca Juniors y Guillermo Brown de Madryn. En aquel evento "se produjeron daños y hechos vandálicos", sostienen. "Se siguió jugando y el Ministerio de Seguridad no calificó como de Alto Riesgo ese torneo", replicaron.

Agregan que en los últimos tiempos, los dirigentes del fútbol mendocino debieron soportar "a veces la indiferencia de algunos funcionarios a la realidad social" poniendo "excusas para lograr el desaliento en el pedido de algún apoyo". Además de que "siempre caen en la simpleza de determinar Operativos Faraónicos y prácticamente imposibles de soportarlos económicamente" para un grupo de "voluntarios activos que llevan adelante la actividad con un solo fin, el bien de los jóvenes y niños" de la provincia.

VAVEL Logo