El hincha ya se nota molesto y exige un cambio. No de técnico ni de jugadores sino de idea e intención al afrontar los partidos.

Pasa que nadie vio esta posible faceta de Estudiantes cuando el equipo, con mismo esquema y nombres, consiguió las únicas victorias de la temporada corriente. Hablo de Gremio y Boca, nada mas ni nada menos.

Claro estaba que el desafío sería competir con esa rigurosidad y concentración con estos equipos de gran experiencia que contra Belgrano, Godoy Cruz, Aldosivi, etc. Ayer, con San Lorenzo, se terminó de ver la caída anímica y futbolística que atraviesa el León, y mas allá del resultado, no da la sensación de que aparezcan, en el corto plazo, posibles soluciones para remontar la situación.

Los nombres que vemos dentro de la cancha son lo mejor que hay, más teniendo en cuenta las lesiones de Pavone e Iván Gomez. Dos posiciones en las que empiezan a reconocerse dilemas, el 5 y el 9.

Nadie discute la trayectoria e idolatría que tiene, y lo que significa el Chapu Braña para todo Estudiantes de La Plata, pero hoy, y ya hace varios partidos, se lo ve limitando y enleteciendo todo el juego de Estudiantes. Tanto en la presión intensa y los relevos, como en la salida con pelota dominada. Tiene la intención de cortar adelante y, cuando no termina con falta, es superado. En su zona no hay nadie que releve, ya que el presente de Zuqui no anima a pensar que va a dejar todo, ni que tenga la capacidad conceptual de cumplir esas labores defensivas. A veces, incluso, se vio al mendocino trotando, en situaciones que eran para dejar todo y volver con intención de quitar y ayudar en esa faceta. En la salida tampoco es una opción clara y dinámica, más se esconde detrás de los volantes rivales, esperando un pase a lo Koulibaly de Noguera o Campi, en vez de ser él ese primer pase.

Pero volviendo al tema Chapu, no hay dudas que el nivel mostrado a principio de temporada por Iván Gómez es lo que necesita este equipo, por encima del ídolo e histórico Rodrigo Braña. 

Yendo al caso del '9', Pavone tampoco está disponible, pero hablemos de lo que viene. Tiene como titular a un Apaolaza hiper aguerrido, metedor, corredor, asociativo, pero le falta esa faceta, común en la edad, en donde el tanque se destaca. El juego de espaldas, el pivoteo, y la capacidad para generarse situaciones sin depender de ningún compañero. No sería alocado, y podría ser productivo, pensar una delantera compuesta por los dos juntos.

Iván y Pavone son las dos posibilidades con más capacidad para ayudar al equipo, y hoy no están a la par del grupo. Así de complicado es el presente de Estudiantes, que no le queda otra que reforzar este plantel escaso de variantes en el mercado que se abre en Enero, si es que no quiere pensar en la tabla de abajo cuando arranque el torneo que viene. 

Volviendo a la causa del desconcierto y el malestar, el partido vs. San Lorenzo. Vimos un equipo sin sorpresa, con las mismas armas que son claras desde el inicio de la temporada pero sumando la imprecisión e irregularidades típicas de un equipo que no encuentra el rumbo. Cuando tiene la pelota, es insipiente e inofensivo, predecible para el rival. Es por esto que llama la atención la intención del Chino de robarle la pelota al rival.

Al inicio del partido, el equipo buscó presionar alto a San Lorenzo para quitarle la pelota pero solo fue efectivo algunos minutos. Cuando Estudiantes fue superado en esa primera línea de presión, el retroceso fue tardío y frío, sin vehemencia. Sobre todo de parte de Zuqui, el de más responsabilidades defensivas al lado de Braña.

Justamente de un retroceso tardío y relevos nulos llega el penal polémico del Chapu, que llegaba de atrás y se llevo puesto a Gaich. Esta situación le sacó al Pincha la cabeza del partido regular que estaba haciendo.

Desde la pelota parada había encontrado el gol del empate y, más allá de la derrota, cabe destacar que volvió a dar gol una situación parada. Fue al segundo palo desde la izquierda metida por Zuqui, la dejó al medio Noguera, y llegó Sánchez para empujarla. Podría haberse metido en el partido, y más allá de que se vio la intención de ir a buscarlo con mas intensidad que el rival, siguieron las imprecisiones y limitaciones ofensivas.

Los 4 del fondo no tuvieron errores mayores, ni quedaron mal parados. Excepto en el segundo gol, cuando la Gata perdió una pelota en la mitad de espaldas, que dejo a Sánchez pasado, y entre Noguera y Facu entró un pase de Belluschi a Reniero, que no perdonó y la metió al primer palo de Andújar.

La variante para darle más peso ofensivo al Pincha fue quien desencadena la situación que termina en el gol en contra. Triste situación ver a la Gata así, y a un banco que no entrega soluciones mejores.

El juego largo, otro de los puntos en que Apaolaza no se destaca y si el Tanque. Estudiantes busca mucho la salida larga, tanto desde Andújar como desde los centrales, pero más pensando en la segunda que en ganar la primera, donde pocas chances tiene. Por esto y algunas situaciones más es que podrían complementarse los dos delanteros con los que cuenta el Chino.

El tercero y definitorio del partido llegó de una buena lectura de San Lorenzo, haciendo una transición defensa-ataque dinámica, otra vez fue el hueco entre Noguera y Sánchez el buscado. El que lo aprovechó esa vez fue el reciente titular del ciclón, Adolfo Gaich. Interesantísimo delantero de 19 años y 192cm, que además de aprovechar su porte físico maneja muy bien los amagues ayudándose con su cuerpo. Fue así que superó a Campi y definió al primer palo, parecido al de Reniero.

El jugador que disputó el torneo de L'Alcudia con el sub-20 sentenció un partido que dejó al pincha diezmado y con muchas conclusiones por sacar.Al Chino no le va a quedar otra que mover las pocas fichas que tiene, y transformar estas conclusiones negativas en algo positivo para lo que viene, cuando el Pincha, más que siempre, necesitará cosechar victorias. 

Pensando en las posibilidades anteriormente nombradas, no se ocurre algo alejado a lo que hay, pero si un clásico y ya visto de parte de Benítez 4-4-2. Veremos si, en este esquema, el que paga es Zuqui, Luguercio o quién. Para el 4-4-2 si tiene variantes, y alguien de los que están jugando quedaría afuera, excepto que elija a Luguercio o Pellegrini para acompañar a Apaolaza en punta y los otros 4 que venimos viendo en la mitad.

Planteo algunas variantes de mitad de cancha en adelante, teniendo en cuenta que Andújar, Sánchez, Noguera, Campi y Erquiaga están ya consolidados, y en buen nivel además. Hablo de las posibilidades que nos darían los regresos de Gómez y Pavone.

De lo mejor a lo peor, a mi gusto.
-Pellegrini, Gómez, Zuqui, Rodríguez; Pavone, Apaolaza.
-​Pellegrini, Braña, Gómez, Rodríguez; Pavone, Apaolaza.
-Rodríguez, Gómez, Zuqui, Pellegrini; Pavone, Apaolaza.​
-Luguercio, Gómez, Rodríguez, Pellegrini; Pavone, Apaolaza.

Como aclararon los protagonistas post partido, y nos inculcó Osvaldo Zubeldía hace 50 años, no queda más que trabajar y trabajar todo lo que esté a nuestro alcance y un poco más. Será la única manera de responder a este momento de incertidumbres, y sacar puntos de los que vengan.

Esperando enero con ansias para reforzar un plantel que hoy se considera  corto, pero que tiene mucho material para potenciar. Esto, con jugadores que aporten tanto experiencia como fútbol será mucho más fácil para el Chino. Hablo de Boselli, Sosa, Pablito Piatti, Enzo Pérez, y/o cualquier tipo de apuestas al mejor estilo Verón-Alayes, que pueda llegar a rendir y potenciar su nivel individual y, así, del equipo. Como fue el caso de Duvan Zapata, Otero, entre otros. Pincha, mi buen amigo, esta campaña volveremo' a estar contigo.