Lindo clima de cancha en Quilmes con 6.000 hinchas millonarios y unos 20.000 pincharratas para ver la decimoprimera fecha de la Superliga.

River llegaba de vivir el pase agónico a la final de la Libertadores en la garganta y la cabeza, y Estudiantes de sacar 7 puntos de 9 después de pasar 8 fechas sin ganar.

La intensidad que había mostrado Estudiantes al principio del semestre, es lo que le permitió hacerle un primer tiempo a River que no dejó en superioridad a ninguno. Gran mérito de por si hacerle partido a un equipo de Gallardo, con el empujón anímico que significa jugar la final de Libertadores contra tu clásico rival. El mejor DT de la Argentina guardó pocos de sus hombres de gala y aún así su equipo no encontró la efectividad desde los pies de Nacho Fernández, ni del Pity Martínez que fue reemplazado por el desanimado Juanfer Quintero. Mucho menos en las búsquedas largas a Pratto. 

Estudiantes paró el 4-4-2 que veníamos viendo con algunas variantes conceptuales y tácticas más. Con el ingreso de la Gata Fernández ante la lesión de Francisco Apaolaza, salió a presionar al finalista de América, con participación fundamental del doble pivote Ivan Gómez-Braña. No tuvieron dificultades para relevarse al salir unos metros adelante para tomar las salidas conducidas por Zuculini y Nacho Fernández, que se conectó con el Pity Martínez generaron las aproximaciones más peligrosas. 

Zuqui fue el volante por derecha y Titi Rodríguez tuvo una función que le demandó más versatilidad. Junto con la Gata Fernández e Iván Erquiaga se juntaron sobre la izquierda del ataque pincha para generar los desbordes que terminaron en centros, no aprovechados por Pavone pero generando peligro en fin. Lollo y Pinola no resolvieron con comodidad nunca. 

En el retroceso, la Gata se inclinaba también a la izquierda para sombrear esa zona y liberar a Tití de tener que hacerlo tan adelante, así evitar un posible 2vs1 a Erquiaga, luego lo hizo también por derecha para ayudar a Zuqui y Sánchez. 

Interesante primer tiempo de los de Benítez, que sólo les faltó precisión en las conexiones ofensivas. Parecía que la pelota parada tendría un papel fundamental en el partido. 

Durante todo el partido Estudiantes buscó lastimar desde las búsquedas largas a Pavone, y tratando de explotar los espacios otorgados en la espalda de los cuatro defensores de River. Pero también lo hizo con intento de conexiones dinámicas con pelota al pie, tanto desde el fondo como en las bandas, hubo buenos pasajes en el partido, y así se logró mover la defensa rival y encontrar los desbordes tan necesarios para abastecer al Tanque.

En el complemento, La Gata continuó con su trabajo defensivo pero esta vez arrancando desde la derecha, simulando un 4-1-4-1 y soltándose por toda la cancha cuando el Pincha tenía la pelota. Ahí Zuqui volvía al rol del inicio, por derecha, y Estudiantes, al 4-4-2.

Desde uno de los tiros libres generados en las inmediaciones del área millonaria, que Gastón Fernández acomodó con destino de arco, el Pincha se encontró con el único gol del partido. Luego del remate rebotó en la cabeza de y a Lux se le metió al palo derecho

Después del 1-0 no surgió mucho peligro, y las emociones sólo llegaron para el hincha. Al de Estudiantes por enfilar 3 triunfos al hilo con valla invicta, y 4 sin pe rder. Al de River pensando en el sábado que viene, cuando disputen la ida de la segunda final de Copa Libertadores del ciclo Gallardo. 

Claro está que Estudiantes sigue mejorando, y lo positivo esta vez, además de los buenos resultados, viene por la capacidad para saber adaptarse a situaciones de partidos que no son fáciles, a manejar los tiempos con más tranquilidad y sin desesperación. Así lo aclaró Andújar después del partido. 

Se encontró una solidez muy necesaria para mantenerse regular, y las armas en ataque van aceitándose y creciendo, a pesar de que las lesiones no estén acompañando a las necesidades del Chino. Pellegrini y Apaolaza, dos de los jóvenes titulares del ciclo no se encuentran y apuntan para volver contra Defensa y Justicia en los 63’ que quedan, y el fin de semana que viene cuando se enfrente a Colón, respectivamente.

El Chino tiene la confianza del hincha, y sus ideas le están respondiendo. El equipo sigue potenciando muchos jugadores de abajo, y estos le están mostrando un gran presente y soluciones al equipo. Hablo de Iván Gómez, Iván Erquiaga, Tití Rodríguez, los buenos ingresos de Sivetti, y los hoy ausentes, pero claros baluartes de este momento, Apaolaza y Pellegrini. Todo rueda bien, a lo Estudiantes, se respira buen aire y hay objetivos claros por cumplir, de acá pueden salir muchas cosas positivas.

Es un gran momento para seguir trabajando con optimismo, y apuntar a sumar la mayor cantidad de los 15 puntos que quedan en el semestre cuando, seguramente, el pincha se refuerce para finalizar el campeonato de la mejor manera y apuntar a arrancar la temporada en 1 y 57 con la mayor cantidad de competencias posibles.

Era y seguirá siendo un desafío difícil de cumplir jugarle de la misma manera a equipos de la jerarquía de River, Boca, Gremio o Independiente, que a otros como Aldosivi, Belgrano o Tigre. Así demuestran los resultados, 10 puntos contra los 4 primeros y 0 contra los últimos. Pero en los últimos puntos cosechados hubo de todo, Estudiantes encontró diferentes caminos para sacar provecho y lo hizo bien con 4 equipos de distintos calibres. Atlético Tucumán, Newells, Banfield y River. Lo hizo agarrándose de los puntos positivos y siguió trabajando los puntos que están flojos o para potenciar. De la misma manera seguirán las semanas restantes del semestre y es por eso que el hincha está tranquilo y confía en el presente y lo que viene. 

14 puntos para Estudiantes en los 10 partidos disputados, y continúa sus semanas enfrentando a Colon el sábado 19.10hs, y a Defensa y Justicia, los 63' que restan de aquel partido suspendido.