La primera mitad de Defensa y Justicia fue un campeón total de fútbol practicado por un equipo que sabía donde y cuando empujar, como manejar la aceleración y el tiempo de control, y también como mover la pelota de derecha a izquierda. Y viceversa, para profundizar los lados en el momento adecuado.
El espectáculo 'Halcón' ha tenido a veces un 'socio' de lujo como Boca de Gustavo Alfaro, quien perdió 'de un desprendimiento de tierras' bajo el aspecto táctico al 'eléctrico' Sebastian Beccacece.
Las constantes llegadas en consecuencia dieron lugar a oportunidades de anotación que no se convirtieron en una victoria parcial para los de Florencio Varela solo a partir del impulso del portero de 'Xeneize' Esteban Andrada, y la fortuna que acompañó como una acción de media hora con la que Lisandro López salvó.
El árbitro Fernando Echenique, quien había ayudado a desbloquear el camino hacia la red local opuesta, ignoró el penal que se había cometido de la mano de Domingo Blanco hacía Iván Marcone.
Sin embargo, apenas comenzando el segundo período, y cuando fue absolutamente inesperado, Boca siguió adelante con un golpe lejano y Carlos Tevez, encontró una respuesta suelta al portero Ezequiel Unsain para marcar el único tanto del partido.
Esta fue la primera vez que los Boquenses llegaron al arco del antagonista, porque en la primera mitad acababa de registrar un acercamiento de solo 43 minutos con otro disparo de Tevez 'en todas partes'.
Desde allí pareció que el local absorbió el golpe y bajó la tensión durante unos 10 minutos, hasta el punto de que un campeón de su categoría, Tevez fue lanzado directamente sobre la línea del oponente, y su tiro fue para rozar el palo derecho del arco de Defensa y Justicia.
Boca, empezando un encuentro de golpe por golpe. Sin embargo, la desventaja nubló las ideas del local, ya no fue el mismo y no pudo lograr la hazaña de revertir la historia sobre el final como tantas otras veces hizo a lo largo de la Superliga. El equipo de Alfaro se cerró bien en defensa y sumó tres puntos lejos de la Bombonera.
El gol del Apache