La adrenalina y los festejos van quedando atrás. Esos momentos mágicos para afianzar la relación entre jugadores e hinchas se dejarán de lado cuando este lunes se vuelva a la realidad, y fundamentalmente al próximo objetivo.

Unión tiene un escenario inmejorable en las dos fechas que restan para terminar la Superliga. Se había ido mal, con derrotas seguidas y un panorama completamente distinto al que mantiene en la actualidad.

Mucho tuvo que ver el cuerpo técnico y los jugadores que llegaron, para cosechar 15 de los 27 puntos que consiguió en disputa. Esa sumatoria es lo que lo colocó en la 7° posición, muy cerca de poder acceder por segundo año consecutivo a la Copa Sudamericana.

Si el Tatengue sabía que los rivales tenían que ayudar, primero lo hizo el equipo de Leonardo Madelón con el 3-0 sobre Lanús. Después en el complemento de la fecha 23 se darían absolutamente todos los marcadores necesarios para que Unión escale posiciones y se meta en zona de clasificación.

Fortalecido por el buen partido de ida ante Independiente del Valle, además de que el DT cuenta con todos sus soldados, el partido frente a Defensa y Justicia puede marcar también la consolidación de los santafesinos en el ámbito internacional.

El Halcón apenas perdió un partido en el Norberto Tomaghello y tendrá la responsabilidad por lo menos de ganar, para después esperar que mínimamente Tigre le saque dos puntos y los aspirantes al título definan quien se queda con la copa justamente en el partido que ambos tendrán cara a cara en la última fecha.