River está cumpliendo todas las metas que se propuso a comienzo de año: primero, logró la clasificación a la Copa Libertadores 2020 mediante la Superliga, logrando una buena remontada en la misma (había quedado muy atrás en 2018) y terminando en cuarto lugar, asegurándose al menos un lugar en el Repechaje. Luego, en un grupo muy duro en la actual edición continental (la cual defiende), el Millonario accedió a octavos de final por quinto año consecutivo tras vencer 2-0 a Palestino en Chile, aunque terminó segundo en la Zona A, detrás de Inter de Porto Alegre. No obstante, las lesiones opacan el buen presente futbolístico.

Este 2019 será recordado por la rotación obligada para Marcelo Gallardo. Ya se recuperaron Franco Armani y Exequiel Palacios, siguen en enfermería Milton Casco y Juan Quintero (todos titulares), y ahora le llegó el turno a Matías Suárez, que tuvo que salir en el primer tiempo contra Palestino por una molestia en el hombro. El diagnóstico es el siguiente: esguince acromio clavicular del hombro izquierdo, sin lesión ósea ni ligamentaria

A pesar que la lesión del atacante cordobés no es seria, se perderá actividad oficial por tres semanas, así que quedará descartado para los choques de octavos de final contra Aldosivi por la Copa de la Superliga y del último encuentro del Grupo A de la Libertadores contra Inter en el Monumental (River debe ganar para terminar como uno de los mejores segundos y así, eventualmente, podrá definir una llave de local de cuartos de final en adelante).

La buena noticia es que Suárez, quien venía ganándole la pulseada a Rafael Santos Borré en el once de arranque, llegaría en óptimas condiciones para los partidos de la Recopa Sudamericana ante Atlético Paranaense, fechadas el 22 y 29 de mayo.