Marcelo Gallardo llegó a River Plate, allá por 2014, cuando Ramón Díaz decidió renunciar a su cargo de entrenador, luego de salir campeón del fútbol argentino, y la dirigencia decidió hacer una apuesta muy fuerte por el Muñeco Gallardo. En su momento era un director técnico de poca experiencia, y se dudaba de cómo podía responder desde el banco de suplentes. Sin embargo, Napoleón rompió con todos los pronósticos y en un lapso de cinco años se convirtió en el DT más ganador de la historia de River.

Con la obtención de la Conmebol Recopa Sudamericana, Gallardo llegó al décimo título como entrenador y de esa manera pasó a Ramón Díaz, quien cosechó nueve. Desde que llegó a River, el Muñeco ganó dos Copas Libertadores, una Copa Sudamericana, tres Recopas Sudamericanas, una Copa Suruga Bank, dos Copas Argentinas y una Supercopa Argentina.

Además de esas copas campeonadas por el hombre nacido en Merlo, también se destaca que le ganó dos finales a Boca Juniors (Copa Libertadores y Supercopa Argentina 2018), más dos eliminaciones a este rival (Copa Sudamericana 2014 y Copa Libertadores 2015). Y siempre que eliminó al archirrival de River, fue campeón.

Muchos lo quieren para dirigir a la Selección Argentina, sin embargo el director técnico del Millonario quiere seguir en el club para alzar más copas, por lo menos hasta fin de año. El 9 de diciembre de este año (primer aniversario de la Final histórica ganada a Boca en Madrid) le harán una estatua en el estadio Monumental, la cuál será colocada al lado de la de Ángel Labruna. Merecido se lo tiene.