Al margen de la formación, no será extraño que Newell’s mantenga algunos recaudos que ya mostró en su última presentación, resignando protagonismo para ser más sólido del medio hacia atrás. Así jugó y le ganó a Defensa y Justicia en el Coloso Marcelo Bielsa.

Algunas cosas cambiaron con las derrotas frente a Gimnasia y a Talleres. El equipo se paró unos metros más atrás para recibir al Halcón, que hace un culto de la posesión de la pelota. La postura de la Lepra fue clara. No soltó tanto a los laterales, ni tampoco ejerció una presión alta, como acostumbraba. La intención fue reducir los errores del medio hacia atrás, agrupándose en ese sector. Favorecido por el gol rápido de Maxi Rodríguez de penal, la tuvo menos tiempo y sacó provecho de otras de las pocas ocasiones favorables, con el tanto de Mauro Formica.

Nada de presión alta, ni posicionarse en campo adversario mayor tiempo. Así fue que la idea base con la que se inició este proceso se alteró, atendiendo debilidades y cuestiones específicas. Es que resulta complicado tapar la salida del rival y jugar con intensidad si hay futbolistas sin un gran despliegue. Jerónimo Cacciabue era fundamental en ese aspecto, pero lleva cinco partidos afuera, Mauro Formica todavía busca entrar en ritmo y Maxi Rodríguez no está para cumplir esa función.

La propuesta futbolística frente a Defensa y Justicia ya no fue recuperar la pelota lo más lejos del arco de Alan Aguerre. No fue raro entonces que apareciese en el ataque Luis Leal para reemplazar al lesionado Cristian Insaurralde. La Pantera es inteligente para moverse, pero con menor despliegue, por ejemplo, que Alexis Rodríguez, una cualidad clave para apretar al rival en el fondo y retroceder rápido si es que el oponente supera esa línea de presión.

A Kudelka le toca reemplazar al suspendido Julián Fernández por la acumulación de tarjetas amarillas. Esta modificación obligada llevará a mover a Lucas Villarruel de volante interno a mediocampista central, donde dio señales de que es en la posición que mejor se desempeña. La vacante sobre la derecha del mediocampo tiene a dos futbolistas que reúnen condiciones para jugar allí: Braian Rivero y Aníbal Moreno. El primero es más aplicado defensivamente y por esta razón podría sacar ventaja para estar entre los once.

Newell’s tiene apenas un triunfo de visitante, además de dos empates y dos derrotas. Se encontrará con Argentinos, por demás de efectivo en el Estadio Diego Maradona. Está invicto en su cancha, con cinco triunfos y un empate. El conjunto de Diego Dabove intenta ataques directos y jugar a un ritmo intenso, justamente lo que a la Lepra le tocará contrarrestar.

Argentinos es ambicioso y acostumbra a progresar con envíos largos para aprovechar la segunda pelota. Salta la línea media de sus contrincantes de esa manera. Siendo así, tiene menos sentido aún plantearse ahogar la salida del Bicho.

La atención puesta en las pelotas que lleguen por arriba al terreno propio, los rechazos de cabeza y los anticipos en la segunda pelota parece que serán cuestiones básicas para que Newell’s frene los avances de Argentinos.

Para tener la pelota y generar, la Lepra necesita ser eficaz en la recuperación. Por lo que mostró en el último partido, por los futbolistas con los que cuenta y por el nivel de su contrincante, es probable que trate de conquistarla con un equipo agrupado más atrás de lo que fue común en la Superliga.

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