Ya no queda nada del equipo campeón, por más que la mayoría del plantel continúe. Esa aura ganadora y competitiva de mitad de 2019, ya en febrero de 2020, se perdió completamente. Tigre merodea en la irregularidad en la Primera Nacional, no encuentra el equipo, ni el juego, ni el carácter. Algunas victorias esporádicas mantienen al Matador aún con chances matemáticas de seguir peleando por el ascenso, hoy por hoy parece más utopía que realidad.

El elenco de Victoria venía de ganarle a Atlético Rafaela y necesitaba otro triunfo para seguir escalando y, de una vez por todas, empezar a ser regular en un torneo largo y en el cual no se puede regalar nada. Tenía que visitar a All Boys, que llegaba (y continúa) en el último lugar de la Zona 2. En los papeles, un rival "accesible". En la práctica, un rival que lo superó en el juego, que aprovechó sus chances, que estuvo concentrado y se llevó el premio mayor, dándole otro golpe a Tigre, que sumó tres puntos de los nueve en juego en el 2020. Ni siquiera el empate transitorio (golazo de Lucas Rodríguez) al final del primer tiempo envalentonó al equipo, que volvió a caer en la falta de ideas y la derrota final.

Néstor Gorosito, el DT que le dio la primera estrella al Matador, que lo llevó a jugar por segunda vez la Copa Libertadores (que empezará en marzo, y que sería estímulo para cualquier plantel), no encuentra el rumbo. Los refuerzos, salvo Emanuel Dening, no cumplieron con la expectativa. Ni con los mejores jugadores a disposición logra que si esquema funcione. Le convierten fácil, no tiene eficacia, ni presión, ni se impone en el mediocampo, no aprovecha los momentos para atacar y por ello, en el quinto lugar, con 22 puntos, está a cuatro de Deportivo Riestra (29), que está en el cuarto lugar (zona de Reducido), mientras que los primeros tres equipos ya están cortados (San Martín de Tucumán, Defensores de Belgrano y Sarmiento). Una campaña muy lejos de la que se pensaba. Por lo tanto, Pipo dejó su renuncia a disposición de la dirigencia.

Todavía no hay una respuesta oficial del Club. No obstante, a esta altura, todo indica que Gorosito ya terminó su aventura en Victoria. Se divide en dos etapas, una gloriosa, con estrellas y gran nivel, y otra opaca, deslucida, sin brillo y sin expectativas. Justo coincide con la salida de Diego Monarriz de San Lorenzo, que ahora sí tendrá a Pipo como candidato.