El partido comenzó con una oportunidad temprana para Atlético a través de un remate a distancia que logró despejar Franco Armani con una escasa visión. Casi enseguida, al minuto 5, River generaba un contraataque que no llegó a convertir De La Cruz. Cada equipo mostraba sus armas. Atlético Tucumán enviaba pelotazos a Toledo o a Aguirre, quienes la peinaban para que sus compañeros intenten aprovechar la segunda jugada.
River apostaba a la tenencia con la pelota al piso y la apertura de sus laterales, para concluir la jugada con un centro. A través de esto, River llegaba al primer gol en los pies de Rafael Borré a los 11 minutos, siendo incorrectamente anulado por Patricio Loustau a instancias del juez de línea que tomó una decisión equivoca. Esta es una de las incidencias que le cuesta a River el campeonato.
La defensa de River no se encontraba cómoda y generaba laterales y córneres a favor del local. Así, a los 18 minutos, Atlético Tucumán se ponía en ventaja tras un córner ejecutado de manera perfecta, imposibilitando la reacción de los jugadores Millonarios, y permitiendo a Toledo que abra el marcador de cabeza. Desde aquí, el dominio sería de River Plate buscando el empate, generando faltas y amarillas en rival. Cristian Erbes, Nicolás Aguirre y Luis Fernández eran amonestados en el local.
River Plate seguía con su plan. Pelota al piso, pases seguros y estirar la cancha con sus laterales. Así, a los 34 minutos llegaría el empate. Gran jugada de River, generada por Suarez saliendo del área, abriendo la pelota para Milton Casco y definiendo él mismo de cabeza tras el centro del volante/lateral Millonario. River continuaría presionando e intentaría recuperar la pelota rápido. Esta velocidad y presión generaría el primer amonestado Millonario del partido, Nicolás De La Cruz. Así, con el encuentro empatado en un gol, cerraba el primer tiempo.
El complemento comenzó con los mismos matices. River atacando, teniendo la pelota, intentando la elaboración mientras que Atlético Tucumán apostaba al pelotazo. A los 6 minutos, Heredia cometía un claro penal sobre Nacho Fernández que curiosamente tampoco era visto por Loustau. El rendimiento de este juez debería ser seriamente evaluado por AFA, ya que es reiterativo en sus pésimas actuaciones, ya que, sumado a esto, a los 19 minutos Suarez era tomado de la camiseta en el área rival, algo que sospecha mente tampoco vio el árbitro.
A pesar de los cambios sumamente ofensivos de Gallardo, sacando a Pinola, Suarez y Casco para los ingresos de Scocco, Quintero y Pratto, River no pudo con su nerviosismo. Dejando atrás su filosofía de juego, intentaba saltar líneas, atacar con pelotazos largos, algo que no tuvo efectividad.
El final llegó. River Plate empató 1 a 1 ante Atlético Tucumán y así, permitió que Boca Juniors se consagrara campeón tras vencer a Gimnasia por 1 a 0.