La temporada 2019/20 del fútbol argentino llegó a su fin: en medio de la pandemia COVID-19, la AFA y la Superliga terminaron confirmando lo que ya era un secreto a voces (si bien el anuncio oficial será este martes, Claudio Tapia lo adelantó a los medios). Así dadas las cosas, Argentinos Juniors consiguió ser uno de los clasificados a la Copa Libertadores 2021.

El Bicho de La Paternal volverá a disputar el máximo certamen continental, aquel que supo conquistar en 1985, después de diez años de ausencia.

Fue en 2011, de la mano de Pedro Troglio y con una joven versión de Miguel Ángel Torren, la última incursión de Argentinos en el prestigioso torneo de clubes. En aquella oportunidad el boleto de entrada fue el título obtenido en el Clausura 2010. También participaron de aquella Copa (en la que no estuvieron, por segundo año consecutivo, ni River ni Boca) Vélez, Estudiantes, Independiente - campeón de la Sudamericana - y Godoy Cruz (por primera vez en su historia).

Argentinos formó parte del Grupo 3 junto al América de México, Fluminense de Brasil y Nacional de Uruguay; un verdadero "grupo de la muerte".

El debut del Bicho colorado fue mejor de lo esperado: un prometedor 2 a 2 ante el último campeón brasilero, en Río de Janeiro, ilusionó a más de uno. Pero aquel empate pudo haber sido un triunfo.

Un gol mal anulado cuando las cosas estaban 0-0 (la pelota cruzó la línea antes de ser despejada por André Luis, pero ni el árbitro ni el línea la vieron) y la posibilidad de ir dos veces arriba en el marcador - gracias a los tantos de Franco Niell - dejaron a los de Troglio con sabor a poco. Habían jugado mejor y lo sabían.

Pero la revancha no tardó en llegar. El Diego Armando Maradona volvió a vestirse de fiesta, 25 años después de la última aventura del Bicho en Copa Libertadores. El América de México no iba a ser un rival fácil de vencer: de hecho, el conjunto azteca dio el primer golpe con un tanto del Rolfi Montenegro. Antes de que concluyera la primera etapa, Salcedo (de penal) pudo igualar las acciones. Y en el complemento, con otro de Salcedo y un golazo de Sánchez Prette los dueños de casa pudieron coronar su primer festejo. La espectacular volada de Ochoa para intentar sacar esa pelota que de clavó en el ángulo sólo "agrandó" aquel 3-1 de los bichos que, esa noche, vistieron de celeste.

La siguiente parada fue el Gran Parque Central de Montevideo. Un gol de Niell fue suficiente para cerrar otro importantísimo triunfo de los dirigidos por Pedro Troglio. Hasta ese momento, Argentinos había obtenido 7 de los 9 puntos jugados y se perfilaba como un serio candidato a meterse en octavos de final. Pero a partir de allí, la historia se hizo cuesta arriba.

La "venganza" de Nacional fue en el DAM: 1 a 0 con gol del Morro García. De todas maneras y a pesar del traspié, la ilusión seguía intacta.

La vuelta contra el América fue durísima. Argentinos, con gol de Niell, lo ganaba y rozaba la hazaña, pero los mexicanos terminaron dándolo vuelta con los tantos de Vuoso y Márquez. El desgaste físico fue decisivo en el Azteca.

Y llegó la última chance de "abrochar" el ansiado boleto a la siguiente fase: en La Paternal, ante el Flu. La visita arrancó con todo, logrando desarticular rápidamente el esquema planteado por Troglio. El Tricolor abrió el marcador, pero el dueño de casa lo empató; nueva ventaja de los cariocas que, gracias a su arquero y un palo salvador, consiguieron irse 2-1 arriba a los vestuarios. El orgullo de Argentinos lo llevó a ponerse 2 a 2, pero no alcanzó. Aquella noche, ante más de 14 mil hinchas, Fluminense logró imponerse 4 a 2. El último gol de Fred, de penal y a un minuto del pitazo final, desató una batalla campal entre futbolistas y colaboradores de ambos equipos. Salcedo y Oberman anotaron para las estadísticas.

De aquel grupo, en el que el Bicho sumó 7 puntos, clasificaron mexicanos y brasileros. La Copa finalmente quedó en manos del Santos.

La del año próximo será la cuarta participación de Argentinos en Copa Libertadores (1985, 1986 y 2011 fueron las otras). Para llegar, tuvo que tocar fondo: terminó la Superliga 2018/19 en lo más bajo de la tabla, siendo protagonista en la lucha por la permanencia, y resurgiendo para convertirse en el rival a vencer por River y Boca, animadores excluyentes del último torneo.

Sólo los mejores la juegan y, sin dudas, la clasificación le llega al Bicho en un gran momento.