El Torneo Clausura 2011 fue un torneo el cual ningún hincha de Boca quizo que llegue. Martín Palermo, tiempo atrás había anunciado que ese iba a ser su último campeonato como jugador profesional. Uno de los jugadores más influyentes en la historia del club iba a colgar los botines, se iba el máximo goleador de la institución.

A medida que pasaban los encuentros, uno era más importante que el otro. El 15 de mayo de 2011 llegó uno de los partidos más esperados de ese torneo, frente a RiverBoca llegaba con un andar irregular y el conjunto Millonario peleando la permanencia. Todos los hinchas del conjunto boquense soñaban con que ese último superclásico de Palermo fuera inolvidable, y así lo fue.

Todo pasó en la primera parte. Boca se puso en ventaja gracias al error de Juan Pablo Carrizo, y minutos después llegó Martín, que como siempre, estaba situado en el área y luego un mal despeje por parte de la defensa de River, la pelota derivó en la cabeza del nueve y la puso por sobre el arquero visitante.

Después del segundo tanto todo fue euforia y emoción. Palermo no aguantó las lagrimas y explotó al marcar su último gol ante el rival de toda la vida. Fueron 18 las anotaciones del Titán River a lo largo de toda su estadía en Boca.

Palermo en el Xeneize marcó la extraordinaria cantidad de 236 goles en 404 partidos y ganó 14 títulos, entre ellos se destacan la Copa Libertadores del 2000 y 2007, y la Intercontinental del 00' frente a Real Madrid, donde convirtió los dos tantos.