Contra todos los pronósticos. Sin dudas, en esta edición de la Europa League, los finalistas dejaron atrás a equipos que tenían chapa de candidatos a quedarse con el ansiado trofeo y este miércoles en Sevilla, el conjunto escocés que desapareció en 2012 por culpa de las deudas, nuevamente volvió a los primeros planos y está a un partido de gritar campeón.
En la Copa de la UEFA del 2007/08, cayó en su última final que jugó por dos a cero ante Zenit de San Pertersburgo y se quedó en la puerta de la gloria en este encuentro que se llevó acabó en el estadio Ciudad de Manchester. Sin embargo, en este nuevo año, quiere sacarse la espina y conquistar la ciudad española, en búsqueda de su primera estrella en el ámbito internacional de Europa.
Por otra parte, en su camino en el segundo torneo de importancia del Viejo Continente, terminó segundo en el grupo A detrás del líder Lyon, en esta primera ronda sumó dos triunfos; dos empates; dos derrotas, en total anotó seis tantos y le convirtieron cinco. En la llave de los 16avos de final, sacó de la competición al poderoso Borussia Dortmund con un global de seis a cuatro, en Alemania consiguió un triunfo histórico por cuatro a dos y en condición de local, empataron dos a dos.
En la instancia de octavos de final, no tuvo problemas para vencer a la Estrella Roja de Serbia, en total con un marcador de cuatro a dos. En la ida, en el país de los Reino Unido, golearon por tres a cero y después cayeron por dos a uno en la vuelta en territorio serbio.
Por otro lado, en la serie de los ocho mejores, sufrió más de la cuenta y en una llave cerrada se impuso ante Sporting Braga por un marcador de tres a dos. En los primeros noventa minutos, perdió por la mínima diferencia y en la vuelta ganó por tres a uno en el Ibrox Stadium.
En el mata a mata de las semifinales, Rangers otra vez dio la nota, en los últimos minutos de la vuelta contra Leipzig de Alemania, en un resultado entre ambos compromisos de tres a dos. En suelo alemán, cayó por uno a cero, en los últimos noventa minutos, ganaba dos a uno y todo parecía indicar que se marchaba al tiempo extra hasta que apareció el agónico gol de John Lundstram.