Milton Álvarez (5.5): Con altibajos, el ex Deportivo Morón fue importante para sostener al equipo. En el primer tiempo le atajó un bombazo a Valenzuela, pero tuvo una floja reacción en el empate. En el complemento le contuvo un taco a Bandiera sobre el final, pero en el gol no pudo hacer mucho ante una defensa estática. En el proceso, tuvo otras intervenciones ante el "7" visitante o Colman.

Alex Vigo (2): mal partido del lateral, en lo que probablemente están siendo sus últimos días en el club. Perdió la espalda en el tanto de Vázquez, no retrocedió en más de una ocasión y se ganó una amarilla infantil. Se hace la salvedad de algunos buenos desbordes, incluido el  de la ventaja inicial, pero lo del jugador que pertenece a River fue pésimo.

Sergio Barreto (4): sólido en los cortes, pero impreciso con los pies. En el primer tiempo cerró bien a Colman en el área, pero en el segundo perdió el duelo aéreo con este último para el 1-2. Checho llegó a la quinta amarilla, al igual que Vigo, y no estará frente a Banfield. A favor del formoseño, metió un buen centro en el 2-2.

Juan Insaurralde (1): paupérrimo nivel del Chaco. Lento, impreciso y displicente en la marca del empate Guapo. Un cambio de frente a ningún lado con la necesidad de ganar. Ciclo cumplido para un experimentado que empezó bien, pero no pudo aprovechar la levantada que mostró tras su vuelta a la titularidad.

Edgar Elizalde (3.5): el uruguayo no estuvo a la altura hoy. Perdió a Rodríguez en la remontada rival y se noto su inexperiencia en el ataque para apoyar a los extremos. En los duelos le fue mejor que a Vigo, y le sirvió el gol a Pozzo que no definió bien. Tal vez, sea momento de probarlo en su posición natural: de 6.

Iván Marcone (4.5): no fue la mejor tarde noche del mediocampista. Se lo vio muy impreciso en los pases, y perdió varias pelotas por tardar, siendo la más peligrosa una al borde del área que derivó en su amonestación. Sin embargo, lo salva su gol, en el que cabeceó como un 9. Si está bien en lo físico, tiene que ser el pilar de la renovación. El beso al escudo muestra las ganas que tiene pese a que le falta desde lo físico.

Alan Soñora (3): poco del "10" en el LDA. Toques intrascendentes y no definió la única que tuvo por hacer una de más, tras una gran habilitación de Hachen.

Juan Cazares (4): el ecuatoriano arrancó con todo, y no tardó en pincharse. En el tramo inicial estuvo participativo y ágil, profundizando el juego y creándose situaciones, tal es así que metió el 1-0 por insistir, tras una mala primera definición. En los segundos 45, Juanito mostró que no está en condiciones físicas, y jugó los últimos minutos tocando para atrás, con malos controles y centros. Si se lo pone a punto, el Rojo puede ganar mucho en volumen de juego, al igual de que si logra ser más comprometido en la marca. Inexplicable cómo pidió una mano en lugar de seguir la jugada.

Gabriel Hachen (2): el ex Defensa y Justicia inició bien, con una buena sociedad con Cazares y una asistencia a Benegas que no terminó en gol de milagro. Tras eso, perdió balones de espalda y no pudo aprovechar su dinámica. Jugador a recuperar, pero necesita continuidad.

Tomás Pozzo (1): lo de Toto hoy fue olvidable. No pudo vencer a su marcador para hacer la diferencia en la banda, empezó la contra del empate de Barracas,  en una que tenia el Rey de Copas a favor, por ser egoísta y terminarla mal él, con tres compañeros esperando el pase. Por si fuera poco, se erró uno entrando solo tras un centro de Elizalde.

Leandro Benegas (3): otro cotejo en blanco para el Tanque. Volvió a alejarse del área, definió mal las que tuvo y protestó más de lo que jugó. Parecía haber cortado la racha con Vélez, pero el mal rendimiento colectivo no acompaña a sus limitaciones.

Rodrigo Márquez (3): otro ingreso sin gravitar para el Chila. Mucho traslado que no llevó a ningún lado, y la tibieza de siempre para trabar. La paciencia del hincha con el misionero se está terminando.

Santiago Ayala (4): el delantero entró, corrió y ganó una de cabeza para Benegas que ensayó una chilena. Nada más que ganas para el juvenil, al que también se nota limitado con los pies.