En la tarde noche de ayer, Boca Juniors tenía la difícil misión de sacar los tres puntos en La Bombonera frente a Newell’s para mandar en el certamen. Y lo hizo. Bastó un disparo bien colocado a uno de los palos defendido por Luciano Pocrnij para darle los tres puntos al Xeneize.

En el trámite del juego, Boca fue mucho más que su rival, a pesar de que ambos venían de capa caída tras perder el clásico pero poco le importó a los conducidos por Guillermo Barros Schelotto, quienes se hicieron fuertes en la marca, no mostraron falencias en la defensa en lo poco que atacó la Lepra y fue quien más juego asociativo evidenció en el campo de juego.

La formación que dispuso el Mellizo para este encuentro está más que aprobada porque se vio a un equipo boquense más sólido, compacto, donde en el medio se hizo figura Wilmar Barrios y donde Pablo Pérez resurgió y fue un guerrero en cada pelota que estaba cerca. Fernando Gago, en cambio, aportó la simpleza de siempre para limpiar la jugada mientras que Leonardo Jara tuvo una destacada actuación por la banda.

En el ataque, Darío Benedetto fue un jugador que se hizo el espacio para marcar el gol y nada más porque luego sólo sirvió para presionar a los defensores adversarios mientras que Cristian Pavón sigue peleado con el gol y sigue mostrándose bastante individualista donde en más de una ocasión pudo haberle pasado la pelota a uno de sus compañeros.

En definitiva, el papel de Boca en esta nueva fecha fue una muestra de carácter y presencia, para que todos los demás equipos vean que el Xeneize está más vivo que nunca en el torneo y no tiene intenciones de dejar la punta a otro rival. 

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Sobre el autor
Juani Alburquerque
Redactor y Editor de VAVEL. Amante del básquet.