La experiencia y el talento son características que portan algunos jugadores para tener un gran desempeño. Un caso conocido de estos es el de Fernando Gago, uno de los tantos que surgió de las divisiones inferiores de Boca Juniors y que en este año tuvo buenas actuaciones con la camiseta azul y oro.

Tras su regreso en la famosa seguidilla de clásicos, Pintita había disputado los primeros partidos oficiales del año con la misión de continuar en lo más alto de la tabla de posiciones. Luego, esas malditas lesiones que lo habían marginado por un tiempo del equipo volvían a aparecer.

Esas malditas lesiones

Con su baja confirmada, el volante no estuvo ante Defensa y Justicia, Vélez, Patronato y Atlético Rafaela. Encuentros donde tambaleó el equipo y dejó en el camino algunos puntos que pudieron costarle caro, además del nivel que se mostraba en los partidos y comenzaba a decrecer poco a poco.

La situación en la tabla de posiciones comenzaba a cambiar. El Xeneize empezaba a perder puntos y en el primer día de mayo, Gago que se había recuperado de un desgarro reaparecía ante Arsenal para pisar fuerte en el equipo. Con esos toques mágicos en su juego fue determinante en la victoria del club de la ribera por 3-0 y la gente volvía a ilusionarse.

Luego del empate sin goles ante Estudiantes de La Plata, llegó el Superclásico en la Bombonera y los dos clubes se jugaban tres puntos más que importantes debido a que ambos estaban en la pelea por el campeonato. En aquel partido, el oriundo de Ciudadela marcó el descuento tras dos goles del rival que dejaron atónito al equipo.

Una 'Pintita' de buen fútbol

A partir de allí, el Xeneize levantaría vuelo y no volvería a perder en los partidos que restaron del campeonato. Fernando Gago fue uno de los artífices de este logro y ha sido vital su regreso para elevar el juego del conjunto azul y oro. No solo se dio la vuelta olímpica a mitad de año sino que el nivel grupal elevado derivó en los grandes resultados como los cuatro meses donde no se vieron derrotas.

Con una estrella más en el club y un título más por adjuntar en su currículum, Gago tuvo un segundo semestre diferente. En el comienzo del mismo, sumó 450 minutos es decir que jugó los primeros 5 partidos donde el Xeneize era arrollador y pasaba por encima al rival de turno, en algunas ocasiones con una gran diferencia a favor en el marcador.

En base a sus grandes actuaciones, Pintita fue nuevamente considerado para vestir la camiseta de la Selección Argentina y Jorge Sampaoli lo citó para la doble fecha de Eliminatorias en la cual estaba en juego el boleto a la próxima Copa del Mundo. La cita internacional se daba en La Bombonera y además eran convocados otros de sus compañeros como Pablo Pérez y Darío Benedetto.

Un regreso no tan deseado

Durante la extensa y gran carrera de Lionel Messi, uno de sus grandes socios en el campo de juego fue justamente el mediocampista de Boca. El primer partido de la doble fecha de Eliminatorias fue en la Bombonera ante el seleccionado peruano y ese día, Gago jugaba de local. En el desarrollo del partido, el público presente aclamaba por el ingreso del ex Real Madrid y Roma, ya que el marcador no se modificaba y el entrenador del seleccionado lo mandó a la cancha para cambiar la situación.

A los 14 minutos de la segunda parte llegaba la ovación para Gago quien reemplazaba a Éver Banega y que en los primeros contactos con la redonda mostraban esos buenos pases que lo caracterizan. Sin embargo, llegaba lo que nadie podía imaginar, porque a los 6 minutos de su ingreso, dio un pase en la mitad de cancha y sin tener contacto con un rival cayó muy dolorido.

A los pocos segundos, Fernando se levantó y mirando hacia el banco de suplentes hizo el gesto para que se haga el cambio. Otra vez, las lesiones le jugaban una mala pasada al volante como le sucedió en su rotura del Tendón de Aquiles. pero en este caso el panorama era otro.

Minutos más tarde del partido, el parte médico confirmaba la lesión: "Fernando Gago sufrió la ruptura del ligamento cruzado anterior y ligamento lateral interno de su rodilla derecha". Duro revés para muchos, principalmente para Boca Juniors que debía rearmarse nuevamente y para el jugador, ya que antes había amagado con el retiro y con esta lesión parecía ser el punto final de su carrera.

Con la intervención quirúrgica que llegó a buen puerto, uno de los máximos exponentes del plantel xeneize no bajó los brazos y manifestó sus objetivos para el futuro. Gago garantizó que no se toma vacaciones para volver lo antes posible y también opinó sobre ocupar un lugar en el plantel que viajará a Rusia a disputar el Mundial.

"Yo creo que me dan los tiempos para llegar al Mundial, habrá que ver si se cumple lo previsto. Después va a depender del rendimiento", había declarado el jugador de 31 años sobre una nueva oportunidad mundialista. Gago mantiene viva la ilusión y con el camino de la recuperación desea vestir la camiseta de Boca nuevamente. El propio volante desea realizar y seguir manteniendo viva aquella estrofa de la canción xeneize: Ponga huevo y vaya al frente.