Con la intensidad que tiene un clásico fue el ambiente en Banfield, el estadio Florencio Sola colmado de hinchas del Taladro visualizaron un encuentro que no sólo tuvo un marcador a favor del local sino que dos expulsados, una buena actuación del árbitro y un juego parejo en la mitad de la cancha.

El primer tiempo fue parejo en intensidades y llegadas, se concentró en la mitad y ambos equipos tenían posibilidades de juego y armado de jugadas peligrosas. Pero sólo uno de ambos equipos logró pasar el balón por debajo de los tres palos, el encargado de que esto suceda fue Nicolás Bartolo a los 45 minutos.

Sin más para destacar de los primeros 45 minutos, y luego del descanso, los equipos volvieron a la cancha con el objetivo de ganar, no sólo por los puntos sino que como todo clásico pro el honor que conlleva la victoria. Lanús salió con un cambio ( entró Román Martínez por Hernán Toledo) mientras que los locales continuaban con los mismos once, con estos últimos 45 minutos por jugar se aspiró más de lo que se dio, es decir, todo parecía que se iban a gritar goles de ambos lados como en el clásico anterior pero no fue el caso.

No hubo goles en el segundo tiempo ni penales pateados pero si dos expulsados con tres minutos de deferencia entre ambas rojas, el primero en volver al vestuario fue Alejandro Silva en el equipo Grana por doble amarilla tras tocar la pelota con la mano, mientras que en el conjunto dirigido por Falcioni el que debió retirarse de la cancha fue Carlos Matheu tras ir duramente contra un jugador granate.

Almirón con diez se vio obligado a hacer algunos retoques para seguir en la búsqueda del rescate de algún punto para su equipo, recordando que todo lo que ayude a escalar en la tabla es bienvenido para el equipo de Lanús. Por esto mismo a Marcelo Herrera se fue al banco y a la cancha salto Rolando Guerreño, anteriormente el cambio fue entre Marcelino Moreno por Nicolás Pasquini  El equipo de Facioni también tuvo su cambio en el segundo tiempo (85’) Juan Manuel Cobo por Emanuel Cecchini.