Con 35 años es el capitán de River. Si en algún momento fue criticado, hoy es un referente y hasta una pieza intocable para el DT. Pero, a pesar de que su nivel sigue mantiendose, es imposible negar que el retiro se acerca más y Leonardo Ponzio lo sabe: "Me veo cerca del retiro con la camiseta de River, y me voy preparando para eso porque sé que no es fácil. Lo voy asimilando porque es mejor. Pensando que falta poco, siendo consciente de eso. Disfrutando las pretemporadas, sabiendo que pueden ser las últimas, lo mismo con cada entrenamiento, con cada partido" dijo en diálogo con La Nación.

También admitió que tras su retiro uno de sus deseos es jugar al polo ya que "Se puede jugar hasta la edad en que dé el cuerpo"pero tampoco quiere desvincularse del club de sus amores: "Me veo tal vez en algún lugar en el que se puedan corregir cosas, lo que prefiere un plantel. Hay cuestiones que como capitán te siguen dando vueltas. No me veo siendo tecnico o trabajando en inferiores, porque hay que tener una vocación que yo no tengo", explicó.

Casualmente en los días en los que se pone en duda la continuidad de Lucas Alario con el Millnario, habló de la importancia que le dio a River cuando se fue a jugar a España: "El jugador que está en River valora lo que es River cuando se va de River. Me fui de River en 2009, a Zaragoza, y con el tiempo me di cuenta lo grande que es River, lo que te da y lo que repercute a nivel nacional y mundial. River es un club para quedarse a vivir, y si las cosas van bien, como en este último tiempo, más todavía. River es esto, lo que estamos viviendo hoy. Es de lo mejor que existe en cuanto a lo que te puede ofrecer. A uno eso lo hace feliz".

Por último, como figura que él es un su equipo, le dedicó unas palabras a la situación del fútbol argentino tanto instucional como al juego mismo: "Si tuviéramos una organización seria, nos envidiarían muchos, pero eso lamentablemente no ocurre. El fútbol de acá es muy competitivo, pero desde afuera no se entiende porqué ocurren todas las cosas que pasan en la periferia teniendo tanto para que sea al revés (...) Casi siempre está la necesidad de sumar y sólo sirve el hecho de ganar. Cuando las cosas aprietan, el resultado es más importante y el nivel de juego baja", cerró.