Antes de empezar la temporada se conoció la salida de Nery Domínguez, quien fue el volante central titular del equipo de Coudet hasta el fin del año pasado. Musto iba a ser el titular para el 2016 que venía y nadie estaba seguro si iba a poder hacerlo en el nivel del '23'.

El '5' canalla fue carácter, contención, salida, juego y tuvo presencia de capitán. Empezó sumiso y con los partidos se fue soltando más, sus lujitos ya no sorprenden como hace tiempo. Está afinando su derecha porque cada vez le salen mejor los pases largos, le falta muy poco para alcanzar el sobresaliente. Cuando no estuvo se notó muchísimo, porque por el medio pasaron todos.

No es ningún tímido ni le tiene miedo a las tarjetas

La personalidad no es lo fundamental, pero importa; puede ser un tipo tranquilo y seguir siendo un futbolista muy útil. Pero es un 5 duro, gruñón, metedor. Sus pares canallas repiten y repiten que Damián es una gran persona, todos lo quieren. Pero adentro de la cancha se pone como un león a defender a su equipo y a sus compañeros. Protesta bien, no se pone loco y pide lo justo, no es de los molestos que reclaman por reclamar, por eso no lo amonestan por ello.

Cometer infracciones no es bueno, apelar al Fair Play es lo ideal. Pero a veces son necesarias, quedás mal parado y no queda otra que meter la patita. El que lo hace generalmente es Musto, por el lugar que ocupa y por como queda frente a los contragolpes. En el primer partido ante NOB, empezó el primer gol de central con un gran quite a Advíncula. En el segundo clásico empezó imponiendo presencia frente a Maxi Rodríguez. Lo castigó a los 50 segundos de partido, como diciéndole "acá estoy, no me vas a pasar". En esta etapa no sólo hizo bien su faceta defensiva, le sumó a su tarea la llegada al ataque.

Después de Musto, en utilidad, viene Franco Cervi. Chuky fue de menor a mayor. Después de su venta a Benfica bajó su rendimiento notablemente, pero en este semestre, partido a partido, fue volviendo a ser el desequilibrante. Volvió a ser el veloz y ágil gambeteador capaz de escapar de cualquier marca.

En la derrota frente a Palmeiras en Brasil, Chuky fue el mejor: recibió un penal después de una excelente gambeta, habilitó a Ruben dejándolo solo para definir y estuvo dos veces cerca del gol. En todos los partidos generó muchas infracciones en tres cuartos de cancha y fue figura en partidos importantes, como por ejemplo en la ida contra Atlético Nacional. Frente al Ciclón en su cancha, después de una gambeta, le hicieron el penal que le permitió a Central empezar ganando 1-0.

Giovani Lo Celso empezó como terminó en el 2015, con un nivel altísimo. Jugó dos partidazos: contra Newell's en el Gigante y contra Colón en Santa Fe. Después sólo tuvo buenos minutos en la derrota 2-3 como local ante Vélez. Le pasó algo parecido que a Chuky, cuando se empezó a hablar de su venta al fútbol europeo empezó bajar su rendimiento. Coudet manifestó que la venta de Lo Celso "es inminente" y el vicepresidente Ricardo Carloni declaró que "el valor de su transferencia va a ser histórica para el club".

Los volantes laterales fueron varios, no sólo los de la imagen principal. Jonás Aguirre y Gustavo Colman fueron los que más jugaron después de Montoya y José Luis Fernández. Los juveniles que jugaron los últimos partidos del campeonato no entran en el análisis por la escasa participación que tuvieron.

Aguirre y Colman empezaron bien. Tuvieron un gran partido en Avellaneda frente a Independiente, donde Colman manejó la pelota a su piacere con una gran capacidad y Aguirre metió de contragolpe el 2-0 que sentenció el partido. Además, el ex fútbol turco jugó muy bien el primer clásico. Entró desde el banco para reiniciar los ataques y asistió a Ruben para el 2-0.

Pero luego de la última victoria de Central en el campeonato, aquella contra Sarmiento de Junín en el Gigante, Colman empezó a jugar muy mal. Se supo que transitó problemas personales y a partir de allí no volvió a ser el preciso e inteligente. Coudet lo puso de titular en los últimos partidos del campeonato junto a un combinado de juveniles, donde tampoco pudo hacer diferencia. Al contrario, se puso énfasis en él por ser el más experimentado, y defraudó aún más.

Central perdió el mediocampo ideal muy rápido

José Luis tuvo una lesión temprana en el campeonato. En la tercera fecha, frente a River, Maidana lo golpeó y salió sustituido a los 25' de la primera parte. Venía jugando bien, jugó un buen clásico donde estuvo muy cerca del gol, pegó en el palo. Volvió a las canchas después de un poco más de un mes, en el 3-3 frente a Palmeiras. En su ausencia no hubo un jugador fijo, se alternaron entre Colman y Aguirre, pero ninguno pudo hacer el gran trabajo táctico que hace Fernández.

Coudet: "Estoy convencido de que Montoya es el mejor en su puesto".

Montoya: "Las palabras del Chacho siempre me ayudan a crecer".

El Chaque fue de menor a mayor. Levantó en los últimos partidos de la Copa Libertadores. Jugó una buena serie frente a Gremio y Atlético Nacional. Contra los brasileños empezó la vuelta asistiendo a Ruben y 1-0 para Central. Contra los colombianos metió un golazo de derecha que hizo soñar a todo el pueblo canaya.

Su mejor partido en el torneo local lo jugó ante Vélez Sarsfield. En aquél encuentro, Central empezó ganando con gol de Marco Ruben de cabeza, después de una muy buena asistencia del oriundo de Machagai. En el segundo gol canaya, el de Lo Celso, Montoya comenzó la jugada.

Al principio del semestre, cuando Central anduvo bien, él desentonó. Chacho lo hacía jugar como volante interno, Montoya encaraba por el medio y se le apagaba la tele, no se le caía una idea. El cambio era Montoya por Colman, y la gente cada vez tenía menos paciencia. Con sus últimas actuaciones demostró que por algo su DT siempre lo bancó.