No cabe duda de que esta etapa final del certamen es un ascensor constante; una semana algunos equipos son posibles candidatos al primer puesto y a la próxima vuelven a mitad de tabla.

Pero no es el caso de Vélez y Quilmes. Ambos equipos tienen distintos objetivos pero con un denominador en común, seguir sumando para alejarse de la zona de descenso. 

El más complicado, en esta oportunidad, es el ''Cervecero'' quien ocupa la tercera posición de descenso directo a la segunda categoría del fútbol argentino. Sin embargo, a pesar de que no estar en zona de peligro, el ''Fortín'' tiene la obligación de empezar a ganar y que sus rivales cercanos pierdan.

Mariano Pavone

Proveniente de Tres Sargentos, provincia de Buenos Aires, Pavone es un jugador con amplia trayectoria en el fútbol local e internacional que es necesario en plan de juego de su entrenador, Omar de Felippe. 

El delantero de 35 años maneja bien su rol de nueve habiendo convertido ya 9 goles en este campeonato pero esto no se vio reflejado en su último encuentro ante Godoy Cruz donde Vélez cayó por 3 a 0.

Además, es un estratega una vez que entra al campo de juego, la mayoría de las veces formó parte del once inicial, lo que le permite llevar un análisis y una buena perspectiva de lo que planean en el lado rival. 

Con 22 partidos jugados, 21 como titular y viviendo su segunda experiencia en Liniers, se espera que el delantero puedo volver a la gloria de goles y ayudar al club que tanto le ha dado a terminar el torneo entre los más altos de la tabla.

Rodrigo Contreras

Con pasado en San Lorenzo y en Gimnasia y Esgrima de La Plata, Contreras está dando sus primeros pasos con 21 años y su gran noche puede ser hoy.

A lo largo del torneo, el tucumano siempre fue la alternativa a la hora de cambiar a Federico Andrada, quien en este partido no formará parte del once inicial debido a que el entrenador cervecero Cristian Díaz busca ''variantes en busca de una reacción''.

En este último campeonato todavía no tuvo oportunidad de convertir su primer gol con la casaca del ''Cervecero''.

Quilmes transita un momento delicado, sumergido en zona de descenso, perdió trece de los últimos quince partidos por lo que la presión que tienen sus jugadores y en especial para el delantero de hoy es demasiada pero debe convertir goles si quiere que su club siga en la máxima categoría del fútbol argentino.