La Selección Argentina de Vóley se despidió con una victoria del Mundial de Polonia 2014, ante una potencia, Estados Unidos, bicampeón olímpico y último ganador de la Liga Mundial.

El equipo albiceleste, ya eliminado antes del partido, buscaba mejorar su participación del Mundial pasado en Italia, cuando había quedado en el 12do. lugar. En frente estaba Estados Unidos, que necesitaba un triunfo para acceder al Final-Six.

El primer set fue dominado de principio a fin por el conjunto norteamericano. El saque y la potencia en la red de los estadounidenses fue mucho para la recepción y el ataque argentino. Los del norte se llevaron el primer chico por 25-19.

Los dirigidos por Julio Velasco reaccionaron en el segundo parcial, en el cual estuvieron en desventaja casi hasta el final. Pablo Crer, Sebastian Closter y Facundo Conte fueron los hombres clave en la remontada argentina, y decantaron la manga a su favor en un dramático 28-26.

Argentina siguió con el impulso del segundo set y fue claro dominador en el tercero. Pepe Luis González encendió su brazo izquierdo y empezó a ser indescifrable para los estadounidenses, mientras Luciano de Cecco manejaba las ofensivas para evadir el bloqueo rival. Argentina cerró el chico por 25-20 y dejaba en jaque las ilusiones norteamericanas.

El último campeón de la Liga Mundial sacó a relucir su chapa de candidato y no se dejó vencer fácilmente. De la mano de Anderson y Sander en ataque, pudieron forzar un quinto set al llevarse la cuarta manga en un reducido 25-23. Ya en la muerte súbita, los albicelestes fueron más. Los bloqueos de Pablo Crer y Sebastián Solé fueron claves para marcar diferencias e imponerse 15-11.

Con la victoria de Irán sobre Serbia 3-1, los norteamericanos quedaron eliminados del Mundial ante un rival que ya no tenía nada que ganar, salvo salvar su honor. Con dos triunfos resonantes ante dos potencias como Italia y Estados Unidos, Argentina se fue con una sonrisa de un Mundial que parecía tener un color muy negro y una falsa sensación de fracaso.