Omar Narváez será el protagonista de la velada boxística que se llevará a cabo el 25 de mayo en el Luna Park, donde defenderá por séptima vez el título supermosca de la Organización Mundial de Boxeo ante el mexicano Felipe Orucuta, pero la presencia de Brian Castaño (3-0-0, 2KO) en la pelea de semifondo no pasa desapercibida. 

Castaño nació el 12 septiembre de 1989 en Isidro Casanova, partido de La Matanza. Es hijo de Carlos (su actual entrenador), exboxeador profesional, por lo que mamó el boxeo desde la cuna. De chico también jugaba al fútbol, de enganche. A los 11 años hizo su primera exhibición y con el tiempo se dedicó de lleno al deporte de los puños. Como amateur, según le contó a VAVEL, realizó 186 peleas, de las cuales perdió 5 y empató 5, el resto fueron triunfos. Debutó como rentado el 22 de septiembre de 2012, ganándole por KO técnico a Alejandro Domínguez, nada más y nada menos que en Luna.

También formó parte de Los Condors, equipo argentino que participó en la Serie Mundial de Boxeo organizada por la Asociación Internacional de Boxeo, que mezcla amateurs con profesionales de menos de 15 peleas pagas. Su último combate fue ante Sergiy Derevyanchenko, por los cuartos de final de esta competencia. Su rival venía invicto en 16 peleas, fue dos veces campeón individual y le sacaba una buena diferencia de peso a Brian. El Boxi, como lo conocen en el barrio, lo derrotó demostrando una gran velocidad y justeza para conectar los golpes, pero por sobre todo mostró su chapa de guapo. "Fue la más dura e importante que tuve. Le gané a un monstruo. Pegaba fuertísimo, yo le pegaba y ni se movía. Se venía y venía, yo tuve que boxearle y prenderme un poquito para que me respete", contó.

Brian es un pibe humilde, consciente de sus condiciones boxísticas, por eso le da duro al gimnasio. A pesar de ser catalogado por la prensa como 'el futuro del boxeo nacional', él sigue con los pies en la tierra, con su humildad y su respeto hacia los demás.

El sábado próximo se subirá al mítico ring del Luna Park por tercera vez, ante César Humberto Vélez. Será su primera experiencia a diez rounds y se hará dentro del límite de los superwelter (69.8 kilos).

- ¿Ves videos de tus rivales?

- Sí, soy de mirar videos, trato de ver como boxea y después mi viejo trata de copiarlo en el gimnasio y laburamos con eso.

- ¿Qué sabés de Vélez, tu rival?

- Vélez es bueno, es fuerte, tira y tira y se descubre. Vamos a laburar bien de contra.

- ¿Cómo te venís entrenando?

­- Después de la pelea con Derevyachenko descansé una semana nada más y después le seguí metiendo todos los días. Lo que sí, bajo la intensidad y más o menos un mes antes empiezo a laburar a fondo. Freno el día del pesaje. Ahora, a las 7 estoy corriendo. Hago todos los días tres turnos, mañana, tarde y noche. Dos semanas antes de la competencia meto sábado y domingo también, para mantener el peso.

- ¿Llegás tranquilo con el peso?

- Con el peso estoy tranquilo, manteniendo un kilito arriba, todavía falta una semana igual.

- ¿Qué esperas del 25 de mayo?

- Espero mucho. Que salgan las cosas bien, que todo el esfuerzo en el gimnasio tenga sus frutos. Si puedo ganar por KO sería espectacular, pero quiero ganarla.

- Vas a hacer tu cuarta pelea profesional y la tercera en el Luna, parece que le gustás a los organizadores.

- Eso es por las peleas que salieron. Fueron lindas peleas, hice buenos papeles y a la gente se ve que le gustó. Si a ellos les gusta mi manera de boxear, tengo que aprovecharlo para poder triunfar. Ya te dije, yo quiero triunfar.

- Como amateur hiciste una buena carrera, ¿qué esperás del profesionalismo?

- Ser campeón del mundo y ser el mejor de todos en mi categoría. Si no tenés un sueño o una meta, no llegas a nada. Vas a ser un boxeador del montón y yo no quiero ser uno del montón. Quiero marcar historia en el boxeo.