Plantel: Kieran Brookes, Dan Cole, Joe Marler, Mako Vunipola, David Wilson, Jamie George, Rob Webber, Tom Youngs, George Kruis, Joe Launchbury, Courtney Lawes, Geoff Parling, James Haskell, Ben Morgan, Chris Robshaw (capitán), Billy Vunipola, Tom Wood, Danny Care, Richard Wigglesworth, Ben Youngs, Owen Farrell, George Ford, Brad Barritt, Sam Burgess, Jonathan Joseph, Henry Slade, Mike Brown, Alex Goode, Jonny May, Jack Nowell, Anthony Watson.

Camino a la RWC:

El equipo ingles se clasificó por ser el local, aunque no hubiera tenido problema en estar en la copa ya que es el cuarto en el ranking de la World Rugby (ente que regula el rugby mundial).

Los británicos en los últimos tres mundiales tuvieron grandes papeles, a excepción del último. En Australia 2003 ganaron el torneo, primera y única vez en su historia, en Francia 2007 llegaron a la final y fueron derrotados por Sudáfrica. Y en el último mundial en 2011, jugado en Nueva Zelanda, perdieron en cuartos de final contra Francia. En los años siguientes no lograron obtener el torneo Seis Naciones (torneo de más importancia en Europa), pero a pesar de eso, pudieron consolidar su idea de juego, impuesta por su entrenador Stuart Lancaster.

Si Inglaterra supera los desafíos que tiene en su grupo, se hará muy fuerte y será un firme candidato a ganar la copa, pero deberá jugar con máxima concentración, y tendrá que manejar la presión de la localía.

Su entrenador:

Stuart Lancaster se convirtió en el ‘head coach´ de Inglaterra en 2011. El juego que propone se caracteriza por ser dinámico y frontal, con jugadores que imponen un fuerte rigor físico, que desde la implementación, encajo muy bien, y el juego ingles subió su nivel.

Figura:

Dentro de los grandes jugadores que hay en el plantel de La Rosa, el más destacado es Mike Brown, full-back. Brown se consolido en los últimos años, y desde que agarro la camiseta 15, se afianzó y a muestra de grandes actuaciones se gano su lugar.

A tener en cuenta:

De más está decir que tienen el plus de ser los anfitriones, lo que hace que la exigencia sea mayor y se podría decir que tienen la obligación de ganar el torneo. Además como dicen en Inglaterra, suman el llamado ‘factor Twickenham', que es poder jugar en su cancha, donde se hacen más fuertes.