Ya es una realidad. A pesar de no poder contar con su capitán, Greig Laidlaw, el seleccionado británico extendió su buen momento tras doblegar al Dragón Rojo, algo que no habían conseguido en la última década. Han pasado muchísimas cosas desde aquel sábado 10 de febrero del 2007, día en el que se impusieron por 21-9, también en Edimburgo. El rugby ya no es lo que era antes. El deporte ha cambiado. Según una porción de los fanáticos, para mejor; desde la óptica de otros, para peor. En aquel entonces, el polifuncional back Chris Paterson era la gran figura del Cardo. Hoy, a diez años de aquel hecho, el ex jugador de Glasgow Warriors, Edimburgo y Gloucester (Inglaterra) está por cumplir cinco años fuera de las canchas. En la actualidad, los hermanos Jonny y Richie Gray son los que acaparan la mayor cantidad de flashes. En fin, un mundo diferente de aquel Seis Naciones 2007 a esta edición 2017.

Lo ocurrido esta mañana, ante 67.144 espectadores, quedará en la memoria de cada uno de los 23 escoceses que hoy saltaron al campo de juego. Gales, por cercanía geográfica y rivalidad rugbística, no es un rival más. Haber ganado este partido, y por cómo se dio, puede ser un impulso vital de cara al futuro inmediato.

Rugbísticamente, el local, octavo en el escalafón mundial, edificó su victoria a partir de un sólido pack de forwards que se encargó de poner al equipo adelante y una línea de backs que exprimió al máximo las situaciones que tuvo para vulnerar el ingoal rival. Los tries llegaron gracias a sus dos wines, Tommy Seymour y Tim Visser. Además, Finn Russell aportó 19 puntos -cinco penales y dos conversiones-. La visita, en cambio, sumó a través del try de Liam Williams y de su fullback y estrella Leigh Halfpenny -dos penales y una conversión-.

Dentro de catorce días, en el mítico estadio de Twickenham, ubicado en Londres, Escocia se medirá con la Rosa, el único invicto que tiene este Torneo de las Seis Naciones; Gales, por su parte, enfrentará a Irlanda, en el Principality de Cardiff, su hogar en esta competición.

Síntesis del partido:

Escocia (29): 15- Stuart Hogg; 14- Tommy Seymour; 13- Huw Jones y 12- Alex Dunbar; 11- Tim Visser; 10- Finn Russell y 9- Ali Price; 8- Ryan Wilson, 7- John Hardie y 6- John Barclay (C); 5- Jonny Gray y 4- Richie Gray; 3- Zander Fagerson, 2- Fraser Brown y 1- Gordon Reid.

Ingresaron: 16- Ross Ford, 17- Allan Dell, 20- Hamish Watson y 21- Henry Pyrgos.

No ingresaron: 18- Simon Berghan, 19- Tim Swinson, 22- Duncan Weir y 23- Mark Bennett.

Entrenador en jefe: Vern Cotter.

Gales (13): 15- Leigh Halfpenny; 14- George North; 13- Jonathan Davies y 12- Scott Williams; 11- Liam Williams; 10- Dan Biggar y 9- Rhys Webb; 8- Ross Moriarty, 7- Justin Tipuric y 6- Sam Warburton; 5- Alun Wyn Jones (C) y 4- Jake Ball; 3- Tomas Francis, 2- Ken Owens y 1- Rob Evans.

Ingresaron: 16- Scott Baldwin, 17- Nicky Smith, 18- Samson Lee, 19- Luke Charteris, 20- Taulupe Faletau, 22- Sam Davies y 23- Jamie Roberts.

No ingresó: 21- Gareth Davies.

Entrenador en jefe: Rob Howley.

Puntos en el primer tiempo: 6´ Penal de Finn Russell (Escocia 3-0 Gales). 11´ Penal de Leigh Halfpenny (Escocia 3-3 Gales). 22´ Try de Liam Williams convertido por Leigh Halfpenny (Escocia 3-10 Gales). 29´ Penal de Finn Russell (Escocia 6-10 Gales). 33´ Penal de Leigh Halfpenny (Escocia 6-13 Gales). 40´ Penal de Finn Russell (Escocia 9-13 Gales).

Puntos en el segundo tiempo: 3´ Try de Tommy Seymour convertido por Finn Russell (Escocia 16-13 Gales). 14´ Penal de Finn Russell (Escocia 19-13 Gales). 26´ Try de Tim Visser convertido por Finn Russell (Escocia 26-13 Gales). 32´ Penal de Finn Russell (Escocia 29-13 Gales).

Árbitro: John Lacey (Irlanda)

Jueces de touch: JP Doyle y Matthew Carley (Inglaterra)

Asistente de video: Rowan Kitt (Inglaterra)

Estadio: Murrayfield de Edimburgo